El año infernal de Grimes, la cantante que ha declarado la guerra al hombre más rico del mundo

2023 ha sido un año lleno de acontecimientos para Claire Elizabeth Boucher.

La cantante canadiense, más conocida como Grimes, se ha mudado de Texas a California, ha predicado sobre la inteligencia artificial, ha criado a tres niños menores de cuatro años y ha levitado sobre el escenario de uno de los mayores festivales de música electrónica de baile del mundo.

Y, además, ha entrado en guerra con el hombre más rico del mundo.

En el último lustro, Grimes, que saltó a la fama en la década de 2010 con su voz etérea, sus temas de synthpop y su personalidad vanguardista, se ha hecho más conocida por su relación intermitente con Elon Musk, el multimillonario que está detrás de Tesla y SpaceX. Grimes es madre de tres hijos de Musk: X Æ A-Xii, de 3 años, también conocido como bebé X; Exa, o Y, de 2 años; y Tau, de 1 año.

Este año, su extraña relación pareció llegar finalmente a su fin, y el dúo está actualmente inmerso en una sonada disputa por la custodia de sus hijos. El conflicto se centra en una polémica pelea por la jurisdicción: Grimes quiere que los procedimientos legales se lleven a cabo en California, mientras que Musk está apuntando a Texas. La decisión podría suponer una diferencia de millones de dólares en pensiones alimenticias.

La ruptura de su relación coincidió con un año caótico para Musk. Tras apostar por Twitter a finales de 2022 (44.000 millones de dólares), lo utilizó para repetir como un loro la propaganda rusa, impulsar mensajes antisemitas y arremeter contra el "virus de la mente woke". Un año después, la plataforma, ahora conocida como X, sigue perdiendo dinero, seguidores y anunciantes. Mientras tanto, Tesla está a punto de perder la guerra de precios y la interconexión del enorme imperio de Musk amenaza con derrumbarlo todo.

Pero 2023 ha sido quizás aún más difícil para Grimes, que ha visto cómo sus hijos —que ahora viven vidas separadas en estados distintos— se convertían en piezas centrales inevitables en una batalla muy pública contra un hombre con recursos prácticamente ilimitados.

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La cantante y el multimillonario

Grimes y Musk comenzaron a salir en 2018. El relato original, tantas veces repetido, es más o menos así: se conocieron en X, entonces conocido como Twitter, tras estrechar lazos por un chiste súper friki sobre inteligencia artificial. Musk quiso hacer una broma especializada, pero Grimes ya se le había adelantado.

La pareja se presentó en sociedad en la Gala del Met de ese año, con Grimes ataviada con un atuendo de robot gótico mientras posaba para las fotos con su novio vestido de blanco.

En los años siguientes, el dúo rompió públicamente al menos dos veces. Durante sus periodos "de descanso", ambos salieron con otras personas: Grimes flirteó con la activista Chelsea Manning, mientras que Musk fue fotografiado trotando por el mundo con la actriz australiana Natasha Bennett. En varios momentos de su relación, Grimes dijo que Elon era "probablemente" su novio, mientras que él describió su situación como "semi-separado."

La pareja también tuvo tres hijos. Grimes dio a luz al hijo mayor de la pareja, X, en mayo de 2020. (Estaba "horrorizada" después de que un "despistado" Musk enviara una foto de ella durante su cesárea a su padre y hermanos). Los dos hijos menores de la pareja nacieron por gestación subrogada en diciembre de 2021 y junio de 2022. La existencia de su hijo menor, Tau, fue revelada este septiembre por el biógrafo de Musk, Walter Isaacson.

Pero X, Exa y Tau no fueron los únicos hijos que Musk tuvo durante la relación. Según parece, Grimes estaba "indignada" después de que Business Insider publicara la noticia en julio de 2022 de que Musk tuvo gemelos con una de sus principales ejecutivas de Neuralink, Shivon Zilis, en noviembre de 2021, un mes antes de que naciera Exa. (Musk es un abierto defensor del pronatalismo, un movimiento creciente en el mundo de la tecnología que sostiene que la caída de las tasas de natalidad es una fatalidad para Estados Unidos y otros países desarrollados). También tuvo seis hijos con su primera esposa, Justine Musk, con la que estuvo casado ocho años).

El padre de Musk, Errol Musk, dijo haber visto a su hijo y a X, junto a Zilis y su par de gemelos, a principios de este mes en un evento de SpaceX.

"Sé una cosa. Elon quiere lo mejor para sus hijos. Sin excepción", explica a Business Insider en un correo electrónico. "Todos ellos están de buen humor. La batalla con Claire es difícil", añade. (Zilis no ha respondido a una petición de comentarios).

Desde el exterior, sin embargo, Grimes, Musk y sus hijos parecieron ser una familia feliz durante la mayor parte de 2023. Grimes habló positivamente de Musk en un reportaje de portada de Wired a principios de agosto, en el que hablaba de su vida como co-padres y elogiaba su capacidad de liderazgo.

Incluso pasaron juntos unas vacaciones en Japón a mediados de agosto. Musk retransmitió en directo parte de la actuación de Grimes desde Tokio y publicó fotos de X en una popular exhibición de luces de la ciudad.

Pero según los documentos judiciales presentados poco después, el viaje sería uno de los últimos momentos de felicidad de la familia, ahora fracturada.

Para demandarle, hay que conseguir notificárselo

Sus problemas se hicieron públicos a principios de septiembre, cuando Grimes publicó y borró rápidamente una súplica airada.

"Dile a Shivon que me desbloquee y dile a Elon que me deje ver a mi hijo o por favor responde a mi abogado", escribió en respuesta a una foto de los gemelos de Musk y Zilis. "Ni siquiera se me ha permitido ver una foto de estos niños hasta este momento, a pesar de que esta situación ha destrozado por completo a mi familia".

Musk la demandó ese mismo día.

En un principio, la demanda, presentada en Texas, pasó desapercibida. Sólo se hizo pública semanas más tarde, después de que Business Insider obtuviera los documentos cuidadosamente redactados. No se sabía exactamente qué quería Musk: sólo se había presentado para "establecer la relación paterno-filial".

Tres semanas después, Grimes presentó una contrademanda. La demanda indicaba que quería la custodia física principal de los tres niños.

Sin embargo, entregar los papeles de la custodia al hombre más rico del mundo fue otra aventura.

Durante una semana de octubre, un grupo de agentes judiciales intentó que Musk recibiera los documentos. Una de ellas comenzó su búsqueda con los registros de vuelo de sus jets privados. "Se ha escrito que el demandado utiliza sus aviones hasta tal punto que sus viajes en aviones de su propiedad han sido comparados con un servicio de viajes compartidos, como Uber", dijo más tarde en un escrito judicial. (El seguimiento de aviones es una práctica que Musk ha criticado públicamente).

La agente dio instrucciones a varios operativos de campo para que visitaran posibles destinos de Musk en el condado de Los Ángeles.

Establecieron puestos de vigilancia en torno a un aeropuerto que Musk frecuentaba y cerca de una instalación de SpaceX. Los agentes también rastrearon webs de noticias y cuentas de redes sociales de personas en la órbita de Musk. Sin embargo, Musk seguía sin aparecer.

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De vuelta a Texas, los agentes visitaron direcciones residenciales asociadas con Musk y Zilis. (Una persona que atendió el buzón de llamadas en este último lugar afirmó no saber quién era Musk, según un agente). También hicieron paradas en la gigafábrica de Tesla, en las instalaciones de SpaceX e incluso en una granja de caballos ligada al multimillonario.

"Nop, aquí no", dijo una mujer en la propiedad cuando se le preguntó por Musk, según una presentación judicial.

Después de visitar más de una docena de lugares por todo Texas y California, los agentes judiciales nunca encontraron a Musk. En lugar de notificarle directamente, dejaron copias de los documentos en los lugares que visitaron y los enviaron también por correo a esas direcciones.

Una guardia de seguridad de la sede de X en San Francisco dijo a la agente judicial que llevaría los documentos al equipo jurídico de Musk. Pero cuando el personal de seguridad de Tesla y SpaceX se negó a aceptar los documentos, los agentes se limitaron a dejar los sobres en el suelo delante de ellos.

Aunque los agentes nunca llegaron a contactar directamente con Musk, expertos en derecho civil aseguran a Business Insider que Grimes cumplió con sus obligaciones. "Ninguno de estos guardias de seguridad iba a dejar entrar a los agentes judiciales", dice Chris Melcher, un abogado que ha representado a Kanye West y a otras familias de alto poder adquisitivo. "Podrían haber ido 100 veces".

Texas vs. California

Mientras tanto, la principal disputa en los tribunales ya estaba tomando forma: Texas contra California.

Musk, cuya fortuna neta se estima en 255.000 millones de dólares, quería que el caso se llevara en Texas —donde los pagos mensuales por manutención de tres hijos tienen un tope de 2.760 dólares—, mientras que Grimes presionó por California, que no tiene límites.

Según Musk, Grimes se había mudado a California recientemente —llevándose con ella a sus dos hijos menores— para evitar los tribunales de Texas. Pero los escritos de los abogados de Grimes dicen que se mudaron a California alrededor del 31 de diciembre de 2022, y que X solo estaba con Musk a pesar de sus objeciones.

Ella dio un paso más en una petición de octubre. No solo los niños no viven en Texas, argumentaron los abogados de Grimes, sino que el propio Musk prácticamente no pasa mucho tiempo allí. Una solicitud de sus abogados decía que desde diciembre de 2022 hasta agosto de 2023, Musk pasó menos de la mitad de su tiempo en Austin, y que estaba en California dos o tres días a la semana.

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A mediados de noviembre, Musk comenzó a plantear preocupaciones de seguridad. Sus abogados exigieron un lugar seguro y un horario y fecha indefinidos para que prestara declaración. A finales de mes, el equipo de Musk pidió al tribunal que restringiera el acceso público al caso, citando la seguridad de sus hijos.

El 30 de noviembre, los abogados de Grimes argumentaron que Musk estaba utilizando acuerdos de confidencialidad para evitar que las niñeras de los niños le proporcionaran información, mientras que simultáneamente los utilizaba para construir su propio caso.

"Al parecer, [Elon] cree que las normas de divulgación simplemente no se aplican a él, y que puede hacer caso omiso de cualquier obligación de revelar información a [Claire] si cree que dicha información podría equilibrar el terreno de juego en este litigio", dice un escrito de los abogados de Grimes.

El tira y afloja no hizo más que aumentar a partir de ahí, y Musk hizo algo que sólo él podía hacer: utilizar su propia empresa como arma arrojadiza en una disputa por la custodia.

Los archivos judiciales del 4 de diciembre de Musk citaron los propios tuits de Grimes en los que decía "Vivo en Austin" y "Vivo en Texas" en 2021 y 2022. También había un tuit del 26 de abril de 2023, en el que Grimes sugería que seguía viviendo en Austin pero que se iba a mudar de casa. (Musk dijo que la cantante se estaba trasladando a su residencia en ese momento.) Otros tuits que envió en mayo sobre problemas con la vivienda en Texas también parecían sugerir que todavía vivía en ese estado, según el abogado de Musk.

Pero Musk no se detuvo ahí. En una declaración escrita, enumeró fechas específicas en abril, mayo y julio de 2023 en las que los niños vieron a su pediatra en Austin. Musk también afirmó que los niños habían asistido a una guardería en Austin en los meses de julio y agosto. X, dijo, todavía asiste a preescolar allí.

Después del viaje a Tokio, dijo, todos volaron de regreso a Texas por unos días, y el 23 de agosto, Grimes se fue a California con dos de los niños.

Musk dijo que presentó su demanda 15 días después, cuando se dio cuenta de que ella no iba a regresar a Texas con sus hijos.

También dio a entender por qué pensaba Grimes había ido a California.

"En varias ocasiones en el último año, cuando había conflicto en nuestra relación, [Grimes] me dijo que sus amigos le advertían que California sería una mejor jurisdicción judicial para ella que Texas, si alguna vez tenía que litigar", escribió Musk.

El proyecto 'Grimes'

Mucho antes de que Grimes saliera con Musk, antes incluso de que Grimes fuera Grimes, era Claire Boucher.

En 2006, esta joven de 18 años se mudó a Montreal y enseguida entró a formar parte de la escena musical experimental, donde acabó desarrollando su personalidad sobre el escenario.

"Seguía una carrera artística profesional, pero al mismo tiempo apoyaba el arte más vanguardista y político, sobre todo en nuestra escena local", explica a Business Insider Matthew Edmund Duffy, amigo y colaborador desde hace mucho tiempo. Pero a medida que su perfil crecía, afirma que ella luchaba por equilibrar los proyectos de arte outsider y la comercialización de su trabajo como Grimes.

La división se hizo especialmente profunda después de que ella se trasladara a Los Ángeles en 2015. Cuando empezó a salir con Musk, algunos de sus antiguos amigos la aislaron por completo, cuenta Duffy.

A él y a otros amigos "les disgustó mucho. Realmente no tenemos mucha fe ni confianza en ese tipo de personas", afirma. Aun así, Duffy cuenta que mantuvo el contacto con Grimes y que ella parecía feliz con Musk y su familia en los primeros días.

Ahora, sin embargo, Duffy ve parecidos entre su relación con Musk y su complicada relación con lo que ella ha denominado la "basura" de la industria musical.

"No creo que ella realmente se diera cuenta de los aspectos de control total de lo que sucede cuando te involucras en este tipo de ambientes empresariales", dice Duffy. Del mismo modo, cree que vio a Musk como una persona, en lugar de la poderosa entidad política que los multimillonarios pueden representar.

"No sólo son la persona. También son esa institución que hay detrás de ellos", afirma. "Te quedas atrapado en ese tipo de relación en la que no puedes mantener tu propia independencia".

Aun así, a pesar de su agitado año, Grimes publicó nuevo material musical, actuó en Tomorrowland en julio, participó en un debate libre sobre el éxito de la revolución sexual en septiembre e intensificó su evangelización de la IA en todas las plataformas.

La cantante, sin embargo, sigue manteniendo un hermetismo absoluto sobre su actual batalla por la custodia, salvo por un reciente post en X en el que hacía referencia al "drama de su vida personal" y señalaba que no quería "volver a aparecer en público hasta que todo haya terminado, por motivos de cordura". Ella no ha respondido a una solicitud de comentarios, y su portavoz se ha negado a comentar sobre la batalla legal. Ni Musk ni sus abogados han respondido a la petición de comentarios. 

A medida que la batalla se alarga, los pormenores de la disputa permanecerán en secreto. Los esfuerzos de Musk para sellar el caso de Texas dieron sus frutos: a primeros de diciembre, un juez restringió el acceso a los documentos del caso.

Aunque Grimes y Musk nunca se casaron, los divorcios anteriores del multimillonario pueden ofrecer una idea de la ardua batalla a la que se enfrenta Grimes al enfrentarse al magnate multimillonario.

Los tres divorcios de Musk —dos de los cuales fueron con la misma mujer— se produjeron en los tribunales de California, donde el miembro de la pareja con mayores ingresos a menudo tiene que pagar gran parte del coste del divorcio para ambas partes. En 2010, Musk escribió sobre su separación de Justine Musk para Business Insider, calculando que ya le había costado 4 millones de dólares en dos años. Esta vez, Musk se empeña en que su próxima batalla legal se desarrolle en Texas, un estado con un sistema judicial mucho más amigable con los grandes ricos.

Por el aspecto de sus respectivas actuaciones legales, se perfila como una batalla desigual. En la última petición judicial de Musk, Grimes contaba con cinco abogados, frente a los once de él, pertenecientes a tres de los mejores bufetes de Texas. Pero Grimes puede tener otros factores a su favor en 2024.

Si X quiebra o Tesla cae por un precipicio, la atención de Musk —y su dinero— podrían estar ocupados en otra cosa.