La ola de startups cerradas crece y empieza a mojarle los tobillos a la nube

Alistair Barr
| Traducido por: 
Andy Jassy, CEO de Amazon durante el AWS Summit de San Francisco, Estados Unidos, en 2015.
Andy Jassy, CEO de Amazon durante el AWS Summit de San Francisco, Estados Unidos, en 2015.

Matt Weinberger

  • A principios de este año comenzó una extinción masiva de startups que ha dado lugar a una oleada de quiebras y cierres.
  • Se trata de un fenómeno que está empezando a afectar incluso a la industria de la computación en la nube.

En junio de este año, Business Insider ya hablaba de la extinción masiva de startups que estaba teniendo lugar.

Cuatro meses después, esta ola de cierres aumenta rápidamente y está empezando a arrastrar al sector de la nube.

212 startups han quebrado o se han disuelto de alguna u otra forma en Estados Unidos durante el tercer trimestre de 2023, según datos de Carta, un observatorio que sigue de cerca el cierre de este tipo de empresas emergentes.

Dicha cifra no refleja todos los cierres, ya que no todas las startups estadounidenses son clientes de Carta, pero el proceso de cambio es notable. En lo que va de año, Carta ha notificado la clausura de 543 compañías. Un número que representa, con mucha diferencia, la mayor cantidad que se ha registrado en cualquier año desde el 2019.

Se trata de una mala noticia para los proveedores de computación en la nube, puesto que sus ingresos y crecimiento dependen del gasto de esas startups. Si estas jóvenes empresas se están muriendo, va a resultarle más difícil al sector de la nube crecer al mismo ritmo que lo estaba haciendo.

Los cierres de startups van a continuar a un ritmo elevado durante los próximos 2 o 3 trimestres, según Peter Walker, responsable de información de Carta.

Cuando estas compañías se quedan sin dinero y cierran, dejan de gastar en servicios en la nube. Cuando más de 500 startups quiebran en un par de trimestres, las pérdidas se vuelven realmente importantes.

La exposición de Amazon Web Services (AWS) a las startups

Amazon Web Services probablemente sea la empresa más expuesta a este fenómeno. El gigante de la computación en la nube construyó su liderazgo inicial atendiendo a las startups mejor que ningún otro proveedor.

Durante el largo periodo de expansión que han experimentado las startups, esto ha impulsado el crecimiento de los ingresos de AWS. Cuando empresas como Airbnb han pasado de ser pequeños negocios a grandes corporaciones en pocos años, han gastado mucho más en servicios en la nube y Amazon ha salido ganando.

A través de su página web, AWS destaca que ha ayudado a "más startups a lanzarse, construir y tener éxito que cualquier otro proveedor de la nube". La compañía señala que más de 250.000 startups utilizan su plataforma y que el 83% de los 1.000 unicornios de todo el mundo desarrollan su actividad con la tecnología de Amazon.

Del ascenso a la caída

Ahora, sin embargo, ese viento a favor se está convirtiendo en un vendaval.

Cuando Amazon presente sus resultados trimestrales este mismo jueves, los analistas de Bernstein esperan que AWS haya generado un crecimiento interanual de los ingresos del 12,5% en los meses de julio a septiembre de 2023.

Andy Jassy, CEO de Amazon.

"Hemos ajustado nuestra previsión de ingresos de Amazon Web Services en nuestra nota de AWS, teniendo en cuenta un crecimiento más lento de lo esperado de las nuevas cuentas, el gasto y las migraciones de cargas de trabajo", aseguró la firma de análisis en un comunicación que publicó este miércoles.

Esto supone un descenso con respecto a las tasas de crecimiento interanual de AWS de entre el 30% y el 40% desde el 2021, cuando las startups estaban rebosantes de efectivo y muy pocas cerraban. La compañía ha acabado estando a la cola del sector en cuanto a crecimiento.

La "optimización" de la nube continúa

También existen otras señales del debilitamiento de la demanda. A última hora del martes, Google también informó de un menor crecimiento de su negocio en la nube. La ejecutiva Ruth Porat lo achacó a los "esfuerzos de optimización de los clientes".

Las acciones de Google se desplomaron un 10%, mientras que las de Amazon han caído un 6% este miércoles.

Amy Hood, la directora financiera de Microsoft, también mencionó este martes esos esfuerzos de optimización. La optimización de clientes significa que, aunque no vayan a la quiebra, las startups y otras empresas más grandes siguen intentando encontrar formas de controlar sus gastos en la nube.

Existe una gran excepción con respecto a estas preocupaciones

El auge de la inteligencia artificial generativa está disparando la demanda de servicios de IA en la nube. En medio de la ola de extinción de startups, algunas de ellas que están centradas en la inteligencia artificial están consiguiendo nuevas rondas de financiación y están utilizando parte de ese nuevo dinero para gastarlo en servicios de IA en la nube.

 

Hasta ahora, sin embargo, Microsoft parece ser el principal beneficiario de este fenómeno. El crecimiento de la nube de la compañía ha sido saludable en el tercer trimestre, impulsado por la demanda de nuevos servicios de inteligencia artificial.

Cuando Amazon presente sus resultados este jueves se va a poder comprobar si AWS también ha sido capaz de subirse al carro de la IA. 

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.