¿Qué dice el color de tus heces sobre tu salud? Cuándo debes preocuparte e ir al médico

Salvo que tengas 5 años, hablar de la caca te producirá algo de rechazo. Pero aunque sea un tema incómodo, la realidad es que las heces importan. Al menos en lo que se refiere a tu salud: pueden decir mucho de lo que pasa en el interior de tu cuerpo.

Como sucede con la orina, su aspecto puede indicar carencias en tu dieta o diversas enfermedades. Algunas tan serias como el cáncer de colon, así que vale la pena echar un vistazo si piensas que algo va mal.

En una evacuación intestinal típica, aproximadamente las tres cuartas partes del volumen de las heces son agua. El 25% restante es una mezcla de bacterias, alimentos no digeridos y sustancias aportadas por los intestinos y el hígado, como la mucosidad y la bilis, que ayudan en la digestión de las grasas.

Y aunque no haya dos iguales, la escala de heces de Bristol clasifica los desechos en función de su forma, clasificándolos en 7 grupos. Aquellas en forma de trozos pequeños y duros revelan un estreñimiento severo, mientras que trozos de masa pastosa con bordes definidos puede ser señal de falta de fibra. Las heces normales son lisas, blandas con forma de salchicha o serpiente.

Color de las heces: qué indican

"En general, los pacientes se preocupan mucho por el color de las heces", explica a Business Insider España el doctorDiego Sánchez Muñoz, especialista y referente en aparato digestivo.

El color puede ser muy variable, y depender de varios factores, aclara: "En primer lugar, ciertos alimentos matizan el color de las heces; así, algunas verduras pueden dar un color verdoso o la remolacha puede hacer que salgan de color rojizo, por ejemplo".

Así, cuando te llame la atención el color “diferente” de alguna deposición, lo primero que deberías hacer es preguntarte qué has comido en las últimas 24/48 horas, explica el doctor, "ya que muchas veces encontramos la respuesta a esto. No solo el color sino también otras características, como olor, texturao la forma"

Depende también de otros factores, como la composición de la microbiota intestinal. Si está alterada por ingesta de antibióticos o la presencia de algunas infecciones, "la composición de las heces va a ser diferente". 

"Deben ser heces formadas, que no sean brillantes, que se hundan en el agua, que no manchen la taza, que no huelan excesivamente mal", explica la doctora Sari Arponen especialista en medicina interna.

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En cuanto al color, unas heces blancas o de color arcilla "pueden traducir problemas a nivel del sistema biliar o del páncreas, aunque esto es relativamente poco frecuente", considera Sánchez.

Por el contrario, unas heces negras, alquitranadas, sí son más preocupantes, ya que pueden ser un signo de la presencia de hemorragia digestiva, habitualmente del tracto digestivo superior. "Cuando aparecen se trata de una urgencia médica que requeriría que el paciente acudiera a un Servicio de Urgencias", advierte el especialista.

De acuerdo con la Clínica Mayo, todos los tonos de marrón e incluso el verde se consideran normales. Solo en raras ocasiones el color de las heces sugiere un problema de salud grave:

• Gris: puede indicar un problema de hígado o vesícula biliar o ser un síntoma de hepatitis viral, cálculos biliares o hepatitis alcohólica.
• Amarillo, grasoso, maloliente: exceso de grasa en las heces, posiblemente debido a un trastorno de malabsorción como la enfermedad celíaca.
• Naranja: puede deberse al betacaroteno, un compuesto que se encuentra en muchas verduras, como las zanahorias y las calabazas. Algunos antibióticos y antiácidos también puede influir en esta coloración.
• Azul: puede deberse a una ingesta elevada de alimentos azules (arándanos) o bebidas con esta coloración.
• Negro o alquitranado: pude deberse a suplementos de hierro y regaliz negro. El sangrado en el tracto gastrointestinal superior, como el estómago, puede ennegrecer las heces, al igual que enfermedades como el cáncer colorrectal o la cirrosis.
• Rojo brillante: colorante alimentario, o alimentos de color rojo. Sangrado en el tracto intestinal inferior, como el intestino grueso o el recto, a menudo por hemorroides.

Cuándo ir al médico

Sin embargo uno de los aspectos "más importantes a evaluar" en cuanto a las heces es la regularidad.

"Los extremos y, sobre todo, los cambios bruscos son los que nos tienen que llamar la atención para valorar si hay algún tipo de problema de salud", indica el especialista "Por ejemplo, una persona que habitualmente es regular y, de repente, sin motivo aparente, comienza con diarrea a diario mantenida es un caso que hay que investigar".

No obstante, múltiples factores de la vida diaria afectan más allá de la salud: desde la alimentación al ejercicio físico que se realice, la cantidad de agua que se beba y, por supuesto, el estrés.

"Si aparecen los llamados 'signos de alarma', entre los que podemos mencionar sangrado con las heces, pérdida de peso o aparición de datos patológicos en la exploración del paciente, hay que realizar pruebas complementarias como una colonoscopia para evaluar la situación".