El laboratorio de Wuhan acusado de crear y propagar el coronavirus niega cualquier vínculo con el origen de la pandemia
- El coronavirus SARS-CoV-2 fue identificado en el Instituto de Virología de Wuhan, capital de Hubei, China, el pasado 30 de diciembre.
- Dicho laboratorio ha sido acusado de ser el foco de origen del brote de COVID-19.
- Pero la OMS y varios estudios han concluido que no existe ninguna posibilidad de que el coronavirus pudiera haberse desarrollado en un laboratorio.
- En su defensa, Yuan Zhiming, virólogo y director del Instituto, ha negado rotundamente cualquier vínculo con el brote inicial insistiendo en que no tienen evidencias para acusarles y que ninguno de los miembros del personal del laboratorio se había contagiado con COVID-19.
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El coronavirus SARS-CoV-2se identificó en Wuhan el 30 de diciembre de 2019 gracias a unas muestras de pacientes contagiados con una enfermedad desconocida que llegaron al Instituto de Virología de la capital de Hubei, China.
Desde entonces hay varias investigaciones en marcha: la contención de la propagación de COVID-19, la búsqueda de la vacuna o tratamiento temporal y la del paciente cero —una incógnita que señala a varios posibles focos de origen.
Uno de ellos, el laboratorio del Instituto de Virología de Wuhan al cuyo frente está el virólogo Yuan Zhiming.
"Lo que sabemos es que la zona cero del virus estaba a unas pocas millas de ese laboratorio (...) Si simplemente utilizas el enfoque de navaja de Occam, es decir, que la explicación más simple es probablemente la correcta, creo que corresponde a China demostrar que no fue ese laboratorio", insinúa Peter Navarro, asesor comercial de Trump, en Fox News.
Es por ello que Yuan Zhiming, director del Instituto ha respondido los que le acusan de ser el foco de origen del SARS-CoV-2: "No hay absolutamente ninguna forma de que el virus se haya originado en nuestro instituto", insiste a través de la CGTN negando cualquier vínculo con el brote inicial.
Así mismo, el responsable ha insistido en que las posibilidades disminuían aún más si se tenía en cuenta que ninguno de los empleados, investigadores o estudiantes se habían contagiado.
Hasta ahora, es el máximo responsable que ha dado explicaciones al respecto, pero también lo ha hecho la Bat Woman china, Shi Zhengli. La doctora que identificó el virus en murciélagos ha "jurado por su vida" que el virus no tenía nada que ver con el laboratorio, según recoge South China Morning Post.
La OMS y estudios publicados en The Lancet y Nature niegan que el coronavirus haya surgido en un laboratorio
Según el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Zhao Lijian, ha contado a SCMP: "la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dicho que no hay evidencia que demuestre que es fruto de un laboratorio. Y muchos expertos médicos de renombre también han concluido que la afirmación de que el virus se filtró de un laboratorio no tiene una base científica".
Uno de estos estudios estadounidenses sobre el genoma del coronavirus, publicado en marzo en Nature, no encontró ningún signo de que haya sido manipulado. "Nuestros análisis muestran claramente que el SARS-CoV-2 no es fruto de un laboratorio o un virus manipulado a propósito".
"Nos unimos para condenar enérgicamente las teorías de conspiración que sugieren que COVID-19 no tiene un origen natural", recogen también en The Lancet científicos de Estados Unidos y Alemania, enumerando una lista de estudios que indican que surgió de forma natural.
Mientras el director del Instituto de Virología de Wuhan teme que afecte a la colaboración científica contra el coronavirus. "Espero que tal teoría de la conspiración no afecte la cooperación entre los científicos de todo el mundo", dijo a la CGTN.
Pero, según The Washington Post, varios comunicados al Departamento de Estado de Estados Unidos advertían de fallos de seguridad en dicho laboratorio. "Tienen una grave escasez de técnicos e investigadores debidamente capacitados necesarios para operar de manera segura este laboratorio de alta contención", recoge.
Aunque Yuan insiste en que no tienen ninguna evidencia sobre esto y que todo es solo una suposición.
Así mismo, señalar a los distintos posibles orígenes del coronavirus no sólo ha sido obra de Estados Unidos. China también ha acusado al país con el que lleva desde marzo de 2018 en una guerra comercial.
Según también el portavoz del ministerio, Zhao, "hay pruebas fehacientes de la responsabilidad de Estados Unidos sobre el COVID-19" insinuando que pudo haber sido importado el coronavirus a Wuhan por el ejército de Estados Unidos en octubre de 2019 cuando se celebraron en la ciudad los Juegos Mundiales Militares.
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