Las multas de hasta 500.000 euros que plantea el Gobierno para combatir el desperdicio alimentario
- El proyecto de ley establecerá una jerarquía de prioridad para el destino de los productos: bancos de alimentos, industria alimentaria, organizaciones no gubernamentales o industria agraria.
- Las multas por no cumplir las normas de gestión de productos en bares, restaurantes y supermercados parten desde los 60.000 euros.
- Las infracciones más graves pueden llegar a los 500.000 euros.
El Ministerio de Agricultura ha publicado los datos de 2022 y muestran que cada hogar de España ha tirado de media 65,5 kilos de residuos orgánicos (alimentos y bebidas) al año, más de 1.000 euros al año por familia. Aunque el desperdicio de alimentos cocinados ha bajado un 9% respecto a 2021.
El Gobierno de España va a desarrollar un proyecto de ley para frenar el desperdicio de alimentos, que afectará únicamente a bares, restaurantes y supermercados. Quienes incumplan la nueva normativa, pueden ser sancionados con multas entre 60.000 y 500.000 euros, ha informado Noticias Trabajo.
El proyecto de Ley de Prevención de las Pérdidas y el Desperdicio Alimentario tiene luz verde para iniciar los trámites parlamentarios. Se espera que la medida entre en vigor a partir del 1 de enero de 2025 con el objetivo de mejorar la eficiencia económica y reducir el impacto medioambiental.
Los bares, restaurantes y supermercados no podrán desperdiciar comida
Las medidas se aplican a bares, restaurantes y supermercados que superen los 1.300 metros cuadrados. El proyecto de ley establecerá una jerarquía de prioridad para el destino final de los productos:
- Facilitar a los clientes que puedan llevarse lo que no han consumido sin gastos extra y en envases reutilizables.
- Elaborar convenios de colaboración con organismos no gubernamentales, empresas o bancos de alimentos.
- Transformar los alimentos que no se hayan vendido para dar lugar a otros productos: zumos, mermeladas, purés, etc.
- Destinar los alimentos que no sean aptos para consumo humano para la fabricación de piensos, biocombustibles o compost.
- Otros productos inevitablemente se convertirán en basura.
El ministro de agricultura, Luis Planas, ha expresado la importancia de desarrollar planes de gestión de residuos orgánicos: “el desperdicio de alimentos perjudica a los más necesitados, malgasta recursos naturales que son escasos y aumenta los residuos y el impacto ambiental”.
Las multas por no cumplir las normas de gestión de productos en bares, restaurantes y supermercados parten desde 60.000 euros y pueden llegar a 500.000 euros para las infracciones más graves, ha publicado Noticias Trabajo.
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