Los empleados de las startups de coches eléctricos que compiten contra Tesla están desmoralizados, y eso podría ser un golpe mortal para su negocio

Alexa St. John
| Traducido por: 
Los problemas en el sector de vehículos eléctricos han hundido la moral de los trabajadores.
Los problemas en el sector de vehículos eléctricos han hundido la moral de los trabajadores.

Canoo; Rachel Mendelson/Insider

Se suponía que conseguir trabajo en Lucid lo cambiaría todo. 

"No paraban de decir: 'Tesla, Tesla, el próximo Tesla'", recuerda un antiguo supervisor de la empresa de vehículos eléctricos. Decidió renunciar a un empleo estable en la industria del automóvil y trasladó a su familia a Phoenix, cerca del centro de fabricación de Lucid. Se cambió "por el potencial de ganar mucho dinero con esas malditas acciones", según ha contado literalmente a Business Insider.

Eso sucedió a principios de 2021 y muchos apostaban por Lucid como una opción con potencial para ser la próxima Tesla. Iba a salir a bolsa a través de una SPAC que la valoraría en 57.000 millones de dólares. Con grandes planes para fabricar 20.000 coches en 2022, el precio de las acciones de Lucid alcanzó los 55 dólares (o euros) y parecía haber enamorado a Wall Street.

Es cierto que el trabajo lo cambió todo, pero no como esperaba el antiguo supervisor. Se fue de Lucid después de solo unos meses, debido a que el entorno era, para él, demasiado desafiante y excluyente. Se marchó a otra startup de vehículos eléctricos, de la que fue despedido poco después. 

Ahora, busca empleo de nuevo.

"No tengo tanta fe en el sector como antes", afirma.

Este tipo de escepticismo es cada vez más común. En los últimos 6 meses, muchos trabajadores de la industria de vehículos eléctricos han reconocido a Business Insider que no son tan optimistas como antes. Algunos incluso han renunciado a sus empleos debido a su insatisfacción. Todos aquellos que han colaborado en este artículo, prefieren mantener el anonimato, aunque Business Insider conoce sus identidades.

"La moral está por los suelos", sentencia el ex supervisor.

Desde luego, se trata de una mala noticia para empresas como Rivian, Lucid, Canoo, Xos Trucks, Fisker y Faraday Future, que se basan en la fe no solo de los inversores, sino también de los miles de trabajadores que las han elegido por encima de otras empresas tecnológicas.

Y lo que es peor, esta mala noticia llega en tiempos difíciles. Apenas un año después de que la mayoría de estas startups salieran a bolsa, la mayoría se enfrenta a retrasos en la producción, a la crisis de la cadena de suministro y a una competencia cada vez más fuerte de empresas como Volkswagen, Ford o General Motors. Sus balances han empeorado, lo que además les ha llevado a ser más exigentes con algunos empleados y a despedir a otros.

"¿Se ha acabado la fiesta? No lo sé", afirma Martin French, director general de la consultora de automoción Berylls. Pero, según explica a Business Insider, hay una cuestión clara: "Necesitan gente para fabricar coches".

Es probable que aquellas que consigan evitar la huida de gran parte de su platilla, sean las que consigan sobrevivir.

Los planes están hundiendo la moral, y los ejecutivos no están ayudando 

Para capear el temporal, algunos ejecutivos de startups de vehículos eléctricos están recurriendo a los despidos, a la dilución de acciones para conseguir efectivo y a la reducción de los objetivos de producción. Al mismo tiempo, intentan asegurar a los empleados que sus empresas van por el buen camino, aunque estas medidas han empeorado la moral de sus plantillas.

"Tenía la esperanza de ser la siguiente generación, ya sabes, de entrar ahí y empezar a marcar la diferencia", dice un empleado de Lucid recién despedido cuyo padre le inspiró para trabajar en el sector del automóvil. "Fue una mierda".

La dirección de Lucid ha aumentado la presión hasta el punto de que su CEO, Peter Rawlinson, trabaja "codo con codo" con los trabajadores de la fábrica, según contó él mismo durante la conferencia con inversores y analistas tras la presentación de los últimos resultados.

"Sin duda, necesitamos que todo funcione como un reloj", comenta un empleado actual sobre cómo se sienten los trabajadores en medio de la presión para construir 5.000 coches en seis meses. Todo ello para cumplir el objetivo de producción de Lucid para 2022, que se ha recortado en dos ocasiones, mientras la empresa ha perdido talento especializado en operaciones.

La reforma logística que está llevando a cabo Lucid en Tempe (Arizona), junto con la incertidumbre sobre cuándo trasladará la empresa a los trabajadores de allí a su planta de Casa Grande, ha provocado que un empleado de almacén "ya no se sienta feliz yendo a este trabajo", según ha explicado el empleado a Business Insider. Y recientemente ha decidido presentar su renuncia.

Bloomberg dio la noticia de los despidos de Rivian a principios de julio. Los empleados dicen que la empresa, respaldada por Amazon, mantuvo en secreto la noticia durante más de 2 semanas. Durante ese tiempo, la moral ha sido "la más baja que he visto nunca en la empresa", explica uno de los supervisores despedidos.

El consejero delegado, RJ Scaringe, explicó más tarde las medidas de reducción de costes, pero para algunos, se trata de un ciclo que "simplemente forma parte del trabajo, por desgracia", señala otro de los responsables de Rivian, que ya había sido despedido de Tesla.

Por su parte, el CEO de Canoo, Tony Aquila, restó importancia al éxodo de la dirección de la empresa en el cuarto trimestre de 2021. "Quienes sólo buscan un trabajo y algunas stock options son como viajeros de paso en su camino de vuelta a Detroit", dijo durante la presentación de resultados del último trimestre de 2021.

Sin embargo, menos de un año después, Canoo está desesperada por conseguir efectivo y tiene una nueva estrategia de financiación. Desde la empresa, muchos trabajadores también afirman estar cansados y desmotivados.

Y Xos, la startup de camiones eléctricos con acuerdos con UPS y FedEx, solo fabricará una parte de los vehículos que tenía previstos para 2022. Después de los despidos, su CEO afirmó lo siguiente: "Al otro lado de esta tormenta nos espera un futuro brillante". 

"No me importa correr riesgos y cosas así. Pero cuando no tienes las cosas claras, no confío en ti", afirma un directivo de Xos despedido. "No confío en la empresa. No confío en el proceso".

La dirección también pierde la fe

Los portavoces de Rivian, Lucid, Canoo y Xos no han respondido a las solicitudes de comentarios.

Ahora, incluso los directivos de estas empresas se están marchando. Canooha perdido a varios líderes clave, al igual que Xos, Lucid y otras.

"Cuando ves la cantidad de cambios y rotación que tienes en la cima de la empresa, como empleado, lo consideras mucho más preocupante que la valoración en bolsa y el resto de desafíos que enfrenta la empresa", explica otro trabajador.

A pesar de todo, algunos todavía tienen sus esperanzas puestas en el sector. Tres exempleados de Rivian hablan con optimismo, a pesar de haber formado parte de los despidos de este verano. Algunos dicen que continúan teniendo ganas de encontrar oportunidades en la industria de vehículos eléctricos.

Pero, para los empleados que podrían verse tentados por pastos más verdes fuera de este sector, las perspectivas son poco alentadoras, ya que también hay olas de despidos en el ámbito tecnológico, e incluso en empresas ya consolidadas como Ford, que están acometiendo grandes recortes.

"Te dices: 'Bueno, voy a dar el salto a Rivian. Voy a dar el salto a Tesla. Voy a dar el salto a Xos, o a lo que sea", comenta otro trabajador que ha pasado por varias empresas de vehículos eléctricos.

"Da miedo. ¿Cómo puedo seguir siendo relevante en todo esto? ¿Estoy en el sector adecuado?", reflexiona.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.