El verano es la temporada de los mosquitos: especialmente si les gusta tu grupo sanguíneo, el olor que desprendes o tu temperatura corporal, te picarán sin compasión. Si no consigues mantenerlos alejados de ti y ya es demasiado tarde, hay un truco ideal para que las picaduras de mosquito dejen de picarte de una vez por todas.

Se trata de una técnica avalada por estudios científicos y de muy fácil aplicación: el picor desaparecerá aplicando calor sobre la zona de la picadura. Así lo revelaba en X —anteriormente Twitter— el investigador y profesor de Ingeniería Energética en la Universidad Rey Juan Carlos Eloy Sanz.

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Este científico explica que el escozor de una picadura de mosquito desaparece poniendo esa zona a unos 50 °C: la picadura del insecto te escuece por reacción del organismo a las proteínas que nos inyectan con su saliva, tal y como muestra esta investigación.

"Generalmente, la picadura de los mosquitos es inocua, pero en muchas ocasiones puede convertirse en el vehículo de transmisión de agentes patógenos, y desencadenar reacciones inmunológicas indeseables en el hospedero, respuesta producida por las proteínas halladas en la saliva de los insectos, una mezcla compleja de sustancias secretadas por las glándulas salivares", dice el estudio.

Cómo conseguir que la picadura de un mosquito deje de picar

Es muy fácil: para poder aplicar el suficiente calor a la zona, calienta un saco de semillas en el microondas o cualquier cubierto metálico al baño maría y aplícatelo unos segundos. Como alternativa, podrías aplicar el calor del secador o incluso utilizar una bolsa de agua caliente.

Lo que sucede es que, gracias al calor, las proteínas se desnaturalizan y el picor desaparece. 

Si en verano comes mucho queso, cerveza y otros alimentos fermentados; tienes una temperatura corporal alta; grupo sanguíneo 0 o te aplicas cremas que contengan alfahidroxiácidos, serás un foco más atractivo para los mosquitos.

Cuando vuelvan a la carga, ya te sabes el truco.