Del cambio del plan Moves a la reorganización de las etiquetas medioambientales: el futuro de los coches eléctricos, según Aedive

Coche eléctrico cargando

Reuters

  • España ha cerrado el año con poco más de 30.000 puntos de recarga, lejos de los 45.000 cargadores que pactamos con Europa en 2022.
  • Para agilizar la electrificación de la movilidad, Adeive ha presentado una serie de propuestas que pasan por incrementar los incentivos de compras o revisar el número de puntos de recarga.

España sigue trabajando en su camino por impulsar el coche eléctrico y todo lo que le rodea. Aunque en estos últimos años el país ha conseguido dar pasos importantes, lo cierto es que España está por detrás de varios países europeos a la vista de diferentes métricas. 

Aedive, la patronal de la movilidad eléctrica en España y Portugal, ha publicado el informe Propuestas para una hoja de ruta de la movilidad eléctrica en el que se incluyen 18 medidas para impulsar la electrificación en el país. Entre ellas, se encuentra la restructuración del plan Moves III. A pesar de todas las críticas por parte del sector, este sistema de ayudas seguirá vigente hasta el 31 de julio de 2024 o hasta que se acaben los fondos restantes. El problema es qué pasará a partir de entonces.

En Alemania y en otros países varios Gobiernos han optado por dejar de subvencionar las compras de los coches eléctricos, pero en España la situación no es la misma y suprimir estas ayudas podrían complicar aún más la penetración de estos vehículos en nuestras carreteras.

"No se quería romper la línea de continuidad de las ayudas del plan Moves y todavía necesitamos planes de incentivos. Necesitamos extender este plan para que no haya una ruptura y seguimos trabajando con las instituciones públicas para establecer un plan de incentivos", afirma el director general de Aedive, Arturo Pérez de Lucía.

De Cupra a Hispano Suiza: todas las marcas que fabrican coches eléctricos en España

Ese ha sido, desde el principio, la principal queja del sector sobre el plan Moves III. Desde que el comprador lo solicita hasta que llega a sus manos pasa, de media, más de un año. Esto ha provocado en la práctica que muchos usuarios se hayan resistido a cambiar su vehículo.

Desde Aedive consideran que si las ayudas se entregasen en el momento de compra —como se hace en otros países— los usuarios comprarían más. "Un ejemplo es Portugal: sus ayudas son más bajas, pero al recibirlas al momento se incentiva la compra. Esta es la mayor clave en la que tenemos que trabajar. El problema no es que la gente piense que no hay infraestructuras de recarga, es que no hay incentivos", señala Pérez de Lucía.

Esta sería la solución a corto plazo. Con una visión más lejana, Aedive propone acompañar las ayudas de un plan de choque fiscal con mejoras en el IVA, el impuesto sobre sociedades y el impuesto de matriculación para lograr que el coche eléctrico resulte asequible para todos los bolsillos. También propone desplegar medidas para impulsar los nuevos modelos de movilidad compartida a nivel local, después de que el año pasado superasen los seis millones de usos en diferentes aplicaciones.

Por último, entre las propuestas a largo plazo destacan que el sector tiene la vista puesta en los grandes retos de la legislatura. La patronal propone situar la electrificación en el centro de la nueva ley de movilidad Sostenible cuya tramitación, según anunció recientemente el ministro de Transportes, podría reiniciarse en febrero. Aevie apuesta además por el fortalecimiento de la industria nacional ante los ambiciosos planes de ayuda y el reciente éxito de los modelos asiáticos y estadounidenses.

España cuenta con 30.000 puntos de recarga

Otro de los puntos en los que España debe acelerar es en su infraestructura de recarga. Según señala la patronal, el país ha cerrado el año con poco más de 30.000 puntos de recarga. Aunque ha habido una aceleración en el ritmo de instalaciones, aún se está muy lejos de los 45.000 cargadores que el Gobierno se comprometió a tener en 2022.

"Estamos en conversaciones con el Gobierno, que sigue trabajando en medidas que ayuden a solucionar las barreras de crear infraestructuras de recarga. Los operadores señalan que se ha facilitado el tema de las declaraciones responsables gracias al decreto ley, pero no todas las autonomías las han aplicado", subraya el director general de Aedive.

Además, señalan que el uso de estos cargadores ha aumentado un 6% en el último año, lo que demuestra que no hay saturación en los puntos de recarga. 

Actualmente, el consumo de energético anual del transporte es de 300 teravatios hora. Cuando se consiga dar el salto a que la mayoría del parque móvil sea eléctrico, el consumo se reducirá a la mitad.

 

Por último, desde la patronal reclaman una nueva distribución de las etiquetas de emisiones con más sentido. Según vaya calando la electrificación y las calles se llenen de coches eléctricos, se debe replantear cómo están divididas las etiquetas.

Por ejemplo, los coches híbridos deberían dejar de quedar encuadrados en el grupo ECO, ya que uno de sus motores sí es de combustión. 

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.