No puedo creer que tengamos que decir esto, pero por favor, cocina tu comida (y condiméntala también, ya que estás).

La dieta de alimentos crudos o raw diet —compuesta por alimentos sin calentar ni procesar— ha sido nombrada la peor dieta para comer sano por segundo año consecutivo, según la clasificación anual de US News & World Report.

En cada de edición, un completo panel de expertos, desde médicos a investigadores en adelgazamiento, se reúnen para evaluar las dietas más populares y determinar cuál es la forma más saludable de comer en el mundo actual. 

En el proceso, también identifican las dietas que se deben evitar por su excesiva restricción, sus posibles efectos secundarios y sus escasas posibilidades de éxito a largo plazo.

¿Por qué la dieta de alimentos crudos no es saludable?

La dieta de los alimentos crudos o raw diet recibió la puntuación más baja entre las 30 dietas diferentes sometidas a evaluación bajo criterios como la exhaustividad nutricional, la facilidad para seguirla y la sostenibilidad a largo plazo.

La dieta incluye fruta, verdura cruda, cereales y legumbres crudos germinados o remojados, aceite de oliva o de coco prensado en frío y, a menudo, muchos zumos. También se basa principalmente en las plantas —aunque algunas personas optan por incluir pescado crudo o carne cruda, a pesar de los riesgos para la salud—.

Algunos defensores de esta dieta afirman que los alimentos crudos son más nutritivos, pero no tienen en cuenta que la cocción de algunas verduras, cereales y otros ingredientes puede aumentar la capacidad de absorción de nutrientes.

Otro de los principales inconvenientes de la dieta crudívora es que elimina alimentos que pueden ser saludables, como el pan, las verduras preparadas y las legumbres cocidas. También puede resultar difícil obtener todos los nutrientes necesarios, como las proteínas.

Otra preocupación acerca de la dieta de alimentos crudos es que puede ser muy baja en calorías, ya que los alimentos crudos son típicamente menos densos en calorías, lo que puede conducir a la pérdida de peso poco saludable, con consecuencias como la pérdida de masa muscular o a una menor densidad ósea.

Por último, una dieta de alimentos crudos puede ser difícil de seguir a largo plazo, lo que dificulta salir a cenar o disfrutar de eventos sociales relacionados con la comida, según el panel de expertos. La superestrella del tenis Venus Williams, que la siguió por motivos de salud, declaró que no era sostenible para ella.

¿Cuáles son las señales de alarma que indican que una dieta no es saludable o no funciona?

La dieta de alimentos crudos también ocupó el último lugar en 2023, desplazando a la también controvertida dieta keto del último puesto.

Anteriormente, los expertos habían clasificado la dieta cetogénica como la peor dieta a seguir durante varios años consecutivos. Este plan bajo en carbohidratos y alto en grasas ha sido criticado por incluir alimentos procesados poco saludables y demasiada grasa saturada, y por eliminar alimentos saludables como la fruta, los cereales integrales y algunas verduras.

Este año, la keto ha escalado hasta el puesto 25 de la clasificación general y se ha hecho con el primer puesto en pérdida rápida de peso. Investigaciones recientes sugieren que una dieta keto que incluya alimentos nutritivos como verduras de hoja verde y grasas saludables puede ayudar a controlar la diabetes y el peso.

Sin embargo, hay otra dieta baja en carbohidratos entre las tres peores del mundo. La dieta Dukan, clasificada en el puesto 28 de 30 dietas, es un plan rico en proteínas que cuenta con muchos segudiores famosos y que consta de diferentes fases, desde comer solo alimentos ricos en proteínas hasta reintroducir gradualmente algunas verduras. 

Hay un montón de reglas complejas, lo que lleva a los expertos a concluir que es extremadamente restrictiva e incluso puede ser insegura para algunas personas. Además, hay pocas evidencias de que funcione.

Completan las cinco peores dietas en la clasificación planes comerciales como Slimfast y Herbalife (puestos 27 y 29, respectivamente), que se basan en suplementos como batidos o barritas. Según el panel de expertos, estos programas no enseñan hábitos saludables, se basan demasiado en alimentos procesados y pueden dejarte con hambre.