Microsoft continúa despidiendo a trabajadores de HoloLens, Surface y Xbox mientras apuesta por la inteligencia artificial con su "nuevo Bing"

Microsoft ha presentado esta semana su nueva apuesta por la inteligencia artificial, una versión mejorada de su buscador Bing, potenciada con la tecnología que se esconde detrás de ChatGPT. 

Dicho anuncio forma parte de la nueva estrategia de la firma de Redmond, consistente en plantar cara a lo que el CEO de OpenAI —desarrolladora de ChatGPT— denomina como "monopolio aletargado de las búsquedas", ostentado por Google. 

Microsoft confía firmemente en que las herramientas parar generar texto por IA pueden suponer una auténtica revolución. Lo ha demostrado invirtiendo miles de millones de euros en la empresa que está detrás de ChatGPT, OpenAI, y lo quiere seguir demostrando potenciando con inteligencia artificial tantos productos y servicios como sea posible.

Y es que, aunque parezca que Google no esté dispuesta a rendirse así como así, la compañía dirigida por Satya Nadella se encuentra bien posicionada en la batalla por la inteligencia artificial.

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Sin embargo, la fuerte apuesta económica de Microsoft por estas tecnologías choca frontalmente con la reestructuración que atraviesa el gigante tecnológico. A mediados de enero, el propio Nadella anunció su intención de despedir a cerca de 10.000 personas, a través de un comunicado en el que hacía referencia, precisamente, a la estructura de costes de la empresa. 

Pese al importante desembolso que Microsoft está realizando en el negocio de la inteligencia artificial, la firma de Redmond continúa despidiendo a sus trabajadores. Tal y como publica Bloomberg, cientos de empleados pertenecientes a las divisiones de HoloLens, Surface o Xbox han sido despedidos esta misma semana. 

Según han indicado personas familiarizadas con los planes de la tecnológica, el recorte de plantilla que ha sufrido la división encargada del desarrollo de las gafas de realidad mixta de Microsoft, las HoloLens, ha sido tan significativo que cabe la posibilidad de que la compañía no esté interesada en fabricar una nueva generación de este dispositivo. 

Una notificación formal presentada por la empresa en el estado de Seattle (Estados Unidos) ha permitido conocer que han 617 las personas que han perdido su puesto de trabajo.

Otra de las áreas que se han visto más afectadas ha sido la división de videojuegos de Microsoft, Xbox, que ha aplicado recortes en los equipos de marketing y en el Xbox Gaming Ecosystem Group. "Animo a todos a tomarse el tiempo y el espacio necesarios para procesar estos cambios y apoyar a sus compañeros", aseguró el jefe Xbox, Phil Spencer, en un correo electrónico dirigido a sus trabajadores.