Esta simulación muestra por qué no debes usar un ventilador de mesa en la oficina en tiempos de coronavirus
- Con la relajación de las medidas de seguridad y la reactivación de la economía, muchos trabajadores están volviendo a la oficina.
- Un equipo de investigadores alemanes ha analizado cómo evitar la propagación del COVID-19 dentro del entorno de trabajo en una oficina mediante una simulación de posibles escenarios.
- El organismo de salud pública de Quebec, en Canadá, explica que los ventiladores no deberían encenderse cuando exista una persona infectada en la misma sala, puesto que incrementaría la posibilidad de dispersión de las gotas.
- Tras la simulación, se ha llegado a la conclusión de que la solución sería usar una pantalla protectora y una mascarilla, mientras que usar un ventilador sin cobertor facial podría tener graves consecuencias.
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Con la pandemia del coronavirus, muchas empresas han decidido pasarse al teletrabajo en un intento por evitar contagios.
Sin embargo, con el desconfinamiento y la reactivación de la economía, ha llegado la vuelta a la oficina y, con ella, nuevas formas de dispersión del virus.
Las oficinas son espacios cerrados, que reúnen a varios trabajadores respirando el mismo aire y, en ocasiones, sin la requerida distancia de seguridad, susceptibles de contagiarse unos a otros al respirar, toser, hablar y estornudar, según el Instituto Robert Koch, de Alemania.
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La Universidad Técnica de Central Hesse, del mismo país, ha investigado formas de evitar esa propagación del virus en entornos cerrados, creando una simulación que permitiese estudiar distintas posibilidades.
La simulación
La simulación consiste en ver hasta dónde se extienden las partículas que expulsa al estornudar un empleado dentro de la oficina gracias a un monitor.
Sin mascarilla, las partículas llegaron hasta los 2,5 metros de distancia en un solo segundo, aunque esta puede llegar incluso a los 8 metros.
Pero, ¿cuál sería el peor escenario en el que te podrías encontrar?
A pesar de que un comunicado de la Agencia de Salud Pública de Canadá sostiene que no hay evidencia 100% clara de que el coronavirus se disperse por los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado, esta simulación revela que quizás sí tendría influencia.
Ventanas cerradas, sin mascarilla y con el ventilador de mesa encendido. En esta combinación, el virus se extendería por toda la habitación debido a la falta de renovación del aire, aumentando el riesgo de contagio.
En este vídeo puedes ver la simulación:
El organismo de salud pública de Quebec, en Canadá, ha hecho hincapié en que los ventiladores no deberían encenderse cuando exista una persona infectada en la misma sala, es decir, en un espacio cerrado, a no ser que estuviese sola, puesto que incrementaría la posibilidad de dispersión de las gotas.
La solución ideal es usar una mascarilla y una pantalla de protección en entornos cerrados, aunque puede llegar a resultar muy incómodo.
De ahí que, si decides usar solo la mascarilla, debes saber que el virus puede llegar a alcanzar un metro y medio de distancia, que es la distancia de seguridad recomendada.
"Es una protección efectiva si se siguen las reglas de distancia habituales", ha explicado la universidad en un comunicado de prensa.
Además, las mascarillas FFP son mucho más efectivas a la hora de evitar la propagación, por lo que disminuiría esa distancia considerablemente.
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