Las picaduras más letales de insectos para un ser humano, de menos a más letal

"Una sola picadura de mosquito puede llevar a una enfermedad grave e, incluso, la muerte", sentenció en 2014 por el Día Mundial de la Salud la Directora de la Organización Panamericana de la Salud/ Organización Mundial de la Salud, Carissa Etienne. 

De ahí que este insecto se coloque como uno de los animales más letales para el ser humano. En ciertas regiones del mundo exponerse a él puede conllevar una infección de malaria, dengue o fiebre amarilla entre otras.

"La globalización, el aumento de los viajes y el transporte de mercancías, el cambio climático, y el crecimiento urbano están ayudando a ampliar la gama de estas enfermedades fuera de las zonas tradicionales", añadió la especialista.

Los insectos son una clase de animales invertebrados, caracterizados por presentar un par de antenas, 3 pares de patas y en ocasiones 2 pares de alas. Suelen ser de pequeño tamaño y en general despertar desagrado.

Aunque esto no debería llevar al equívoco. Un mundo sin insectos, como al que nos acercamos, sería uno en el que las cigarras no cantarían en verano, las abejas no polinizarían los frutales, ni habría miel. Y eso solo sería el principio del caos.

Pero aunque sean necesarios, también pueden ser portadores de serias afecciones o inocular venenos altamente tóxicos capaces de causar la muerte. Por lo que más vale ser precavido.

7 picaduras de insectos que indican que deberías ir al médico

Aquí una muestra de lo que estos pequeños seres pueden llegar a hacer al hombre. Las picaduras más letales de insectos para un ser humano de menos a más letal.

Hormiga bala (Paraponera clavata)

Su picadura se considera la más dolorosa del mundo, comparada con el impacto de una bala, capaz de producir escalofríos, taquicardia, dificultad para respirar o pérdida de sensibilidad. Un dolor agonizante que se mantiene durante 12 ó 24 horas.

Se encuentra en los bosques de Venezuela, Bolivia y Brasil. Aunque también se han registrado colonias en Costa Rica y Nicaragua.

Aunque no es tóxica podría una persona podría sucumbir a ella por deshidratación tras el ataque o debido al shock generado por el dolor.

Hormiga saltadora (Myrmecia pilosula)

Es una de las pocas especies de hormigas que puede ser peligrosa para los humanos, junto con otras hormigas del género Myrmecia, que segregan uno de los venenos más tóxicos entre los insectos.

Se trata de una especie originaria de Australia, cuya picadura solo causa una reacción leve. Sin embargo, en zonas endémicas, hasta el 3% de la población humana ha desarrollado alergia al veneno, lo que podría conllevar reacciones anafilácticas las cuales pueden resultar mortales. 

Entre 1980 y 2000, 4 muertes se debieron a anafilaxia por picaduras de saltadores, todas ellas en Tasmania, donde tiene especial presencia.

Aceitera común (Berberomeloe majalis)

También conocido como carraleja, es un tipo de escarabajo de gran tamaño, uno de los más grandes de Europa y puede encontrarse en España. Se caracteriza por su color negro con bandas transversales anaranjadas o de color rojo sangre.

Cuando se ve amenazado segrega una sustancia llamada cantaridina, un veneno bastante tóxico ya que provoca daños en la piel, vómitos o diarreas. A estese le atribuyen propiedades medicinales y afrodisiacas, lo que ha provocado muertes, según indica una investigación del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC).

Avispa asiática (Vespa velutina)

Las picaduras de abejas o avispas ya suponen un peligro elevado para quienes muestran alergias. Pero ese riesgo se elevan mucho más, incluso para quienes no muestran esa sensibilidad si se trata de ciertas especies en concreto.

Entre las más letales están la avispa asiática (Vespa velutina) que en nuestro país suele causar en torno a 3 o 4 muertes al año. Esta especie llegó a España en 2005, se cree que desde Francia, asentándose en el norte del país. Aunque su presencia no deja de expandirse, y se cree que para 2029 habrá ocupado todo el territorio.

Todos las muertes se deben al ataque de un enjambre, en el que la víctima recibe varias picaduras, en algunos casos superando la veintena, lo que genera la muerte. El problema está en que la avispa asiática es es muy territorial, por lo que el grupo no duda en defender su nido si se siente amenazada.

Si se tiene una relación alérgica generalizada hay que administrar adrenalina de forma inmediata, ya que es aquí donde se da el riesgo de muerte, por anafilaxia.

Avispón gigante asiático (Vespa mandarinia)

Fuera de nuestro país, el avispón gigante asiático es otra de las avispas que suele considerarse uno de los insectos más venenosos.

Esta especie, nativa de Asia, se coloca como el avispón más grande del mundo, con una longitud 5 centímetros( como referencia la avispa común ronda los 2,5) y una envergadura alar de 7,5 centímetros.

Sin embargo, como recalcan los expertos su veneno no se diferencia del resto de especies. Solo que, al igual que sucede con la asiática se trata de una avispa muy agresiva y territorial. En Japón sus picaduras matan hasta 50 personas al año.

Gusano de la muerte (Lonomia obliqua)

También conocida como taturana oblicua, se trata de una mariposa nocturna de la familia Saturniidae, propia de selvas tropicales de Sudamérica y muy presente en Brasil.

Durante su etapa de oruga presenta pelos o púas urticantes cuyo veneno evita la coagulación de la sangre, lo que puede generar complicaciones hemorrágicas que resulten mortales.

El primer ataque registrado en Brasil se produjo en 1989. 7 años después la investigación contabilizó hasta 600 casos de picaduras, incluyendo 12 muertes. Debido al incremento de incidentes detectado en las últimas décadas, el Instituto Butantan en Brasilprodujo un antiveneno capaz de neutralizar los efectos.

Pulga

Las pulgas pueden transmitir una bacteria llamada Yersinia Pestis, causante de la peste. Una enfermedad muy grave para el ser humano, que en el XIV dio lugar a una de las pandemias más devastadoras de la humanidad, causante de millones de muertes en Eurasia.

En ausencia de tratamiento, la peste bubónica tiene una tasa de letalidad del 30% al 60%, mientras que la variante neumónica resulta invariablemente mortal, alerta la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En la actualidad, los 3 países más endémicos son Madagascar, la República. En cifras, entre 2010 y 2015 se notificaron 3248 casos en el mundo, 584 de ellos mortales.

Chinche Besucona (Triatoma infestans)

Este insecto vive en zonas cálidas de Sudamérica y pica a sus víctimas para chuparles la sangre. Al hacerlo su intestino se hincha y defeca, dejando numerosos parásitos en la piel, que pueden portar la enfermedad de Chagas.

También llamada tripanosomiasis americana, es una enfermedad potencialmente mortal. Ya que aunque en muchos casos resulta asintomática, en otros genera una inflamación del músculo cardíaco o del cerebro.

La enfermedad de Chagas puede causar consecuencias irreversibles y crónicas en el sistema nervioso, el sistema digestivo y el corazón. Afecta a unos 6 millones de personas y provoca alrededor de 14.000 muertes al año, de acuerdo a la OMS.

Mosca tse-tsé (Glossina morsitans morsitans)

La picadura de la mosca tsetsé se convierte en una úlcera enrojecida; a las pocas semanas pueden aparecer fiebre, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor muscular y cefaleas. En las fases avanzadas, la enfermedad ataca el sistema nervioso central y aparecen cambios de personalidad, alteraciones del reloj biológico, trastornos del habla, convulsiones y dificultad para caminar o hablar.

Con su picadura, si este insecto está infectado por parásitos pertenecientes al género Trypanosoma, se transmite la enfermedad del sueño, cuyos problemas pueden evolucionar durante años hasta causar la muerte si no se trata.

Insecto originario de África, presente en una treintenta de países, se caracteriza por sus tonalidades castañas y grises, midiendo entre 6 y 16 milímetros.

En 2009, el número de casos notificados se redujo a menos de 10.000 y en 2019 y 2020 se notificaron 992 y 663 casos respectivamente. Aunque durante el siglo pasado generó varias epidemias en el continente africano.

Mosquito

No solo estropea tus noches de verano, sino que el molesto mosquito se coloca como el animal más mortífero del mundo. Esto se debe a que sus picaduras pueden transmitir afecciones potencialmente mortales.

De todas ellas, la que más casos graves y fallecimientos provoca es la malaria, es una infección parasitaria transmitida por mosquitos del grupo Anopheles que puede provocar el fallo de algunos órganos y la muerte en 24 horas. Según el último informe de la OMS solo en 2020, hubo en el mundo 241 millones de casos de malaria y hasta 627.000 muertes.

ElAedes aegypti es portador del Zika, la fiebre amarilla y el dengue, una de las principales causas de enfermedad grave y muerte en algunos países de Asia y América Latina. Se estima que esta especie de mosquito causa 50 millones de infecciones y 25.000 muertes anuales.