Esa persona con la que estás hablando en redes sociales, en un chat virtual, en Tinder o, en general, a través de una plataforma o web en internet podría no ser quien dice ser o, incluso, no existir. Aunque lo parezca. Aunque responda a tus preguntas. Aunque te haya mostrado una foto suya.

Entre los muchos usos que permite la inteligencia artificial se encuentran también el robo, la delincuencia, la suplantación de identidad y el fraude. Según un estudio israelí, solo se necesitan 9 caras generadas con IA para suplantar entre el 40% y el 60% de las identidades de la población mundial.

El objetivo puede ser hacer una broma de mal gusto o conseguir millones de interacciones, pero también puede tratarse de una estafa que busca sacar dinero de las personas a través de Tinder, Only Fans, redes sociales y aplicaciones o plataformas online.

"ChatGPT hace que sea muy fácil para los ciberdelincuentes hacerse pasar por diferentes personas sin tener grandes conocimientos literarios. [Pueden] aprovechar el modelo lingüístico para generar mensajes más personalizados y engañar a la gente para que sea víctima de ciberataques", explica Martin Cheek, experto en fraude y ciberseguridad de SmartSearch, a Daily Mail.

¿Es ChatGPT seguro? Así es como los ciberdelincuentes están aprovechando la IA

A ello se suma que el ser humano es incapaz de distinguir lo real de lo artificial en el 78% de las ocasiones, al menos de acuerdo con un estudio realizado por la Royal Society en colaboración con la Universidad de Oxford y la Universidad de Brown.

¿Cómo se puede distinguir entre una persona real y una 'persona falsa' creada por inteligencia artificial? ¿Cómo saber cuándo la IA se encuentra detrás de una foto o de una conversación? Como reza la expresión, la diferencia (o el diablo, en su traducción literal del inglés) está en el detalle.

En concreto, algunos de los detalles a los que se recomienda prestar atención para saber si se trata de una persona real o una IA son el fondo y las sombras, el lenguaje y determinadas partes del cuerpo, como los ojos, las manos, el pelo, los dientes, el lenguaje e incoherencias en general, según han apuntado diferentes personas, incluidos expertos en ciberseguridad contactados por Daily Mail.

Detalles en la cara, como los ojos y la piel

Algunas de estas imágenes falsas de personas han sido generadas en los últimos años por sitios web como This Person Does Not Exist (Esta persona no existe), que permite producir imágenes generadas por GAN (Redes Generativas Antagónicas, por sus siglas en inglés).

Aunque la inteligencia artificial y herramientas como ChatGPT o GPT-4 han surgido o se han puesto de moda en los últimos meses, casos con este tipo de fotos han aparecido desde hace años. En 2021, un equipo de científicos informáticos de la Universidad de Buffalo, en Nueva York (Estados Unidos) crearon una aplicación de IA que buscaba proporcionar una forma de detectar deepfakes (falsificación profunda) a través de los reflejos especulares de los ojos de un retrato.

Para ello, hicieron uso de lo que denominaron ajuste del retrato y tuvieron en cuenta diferentes factores, como la línea imaginaria que atraviesa el centro de los ojos y si su posición es paralela a la cámara; si los reflejos del entorno están presentes en ambos ojos y la distancia de estos en relación con la fuente de luz.

Así, los científicos detectaron algunas "inconsistencias" en los ojos sintetizados por IA, como formas geométricas diferentes o localizaciones en diferentes regiones de dichos brillos especulares en ambos ojos, si bien admitieron que el método debía ser perfeccionado. También pueden llamar la atención su inexpresividad, su diferente orientación o el extraño reflejo de la luz en el iris, señalan expertos a Daily Mail.

El medio también apunta a otras partes de la cara que pueden revelar si se trata de una imagen generada por IA, como rostros ligeramente desalineados y de aspecto extraño, y pequeñas diferencias en el tono y la coloración de la piel, como las manchas, los tonos irregulares o el parpadeo en los bordes de la cara.

El año pasado, un usuario de Twitter advirtió en un hilo que se hizo viral sobre algunos elementos que pueden ayudar a detectar que una imagen de una persona no es real, sino artificialmente creada: 

• Las caras son muy básicas y siempre cuenta con una sonrisa neutra, al igual que el gesto.
• La simetría es casi perfecta, sobre todo en los ojos.
• La textura de la piel recuerda a las figuras de cera, aunque esto ha sido perfeccionado en los últimos tiempos.

El pelo

En respuesta al hilo mencionado antes, de Lemonauta, varios usuarios de la red social afirmaron haber observado detalles adicionales que podrían ayudar a identificar a estos falsos seres humanos creados por bots, como pupilas no circulares, dientes que se mezclan con otros o pelos que se difuminan con el entorno.

"Nadie tiene el pelo perfecto, excepto las personas falsas en las imágenes generadas por IA", recoge Daily Mail, que alerta de la ausencia de mechones de pelo irregulares o no sujetos y de "pequeñas imperfecciones" en el cabello que deberían aparecer si se tratase de una persona de verdad. Este es un ejemplo que pone el medio de una imagen de persona creada por una inteligencia artificial.

Las manos

"En el caso de la inteligencia artificial, hay bastantes cosas que se le dan bastante mal, sobre todo las manos. A veces se pueden ver distorsiones en ellas, y a veces pueden ser demasiado grandes o tener un dedo de más", declara Cyril Noel-Tagoe, investigador principal de seguridad de la empresa británica de ciberseguridad Netacea, a Daily Mail.

Las manos dibujadas o creadas por una IA pueden tener rarezas e incoherencias derivadas de que la herramienta ha sido alimentada por multitud de imágenes que utiliza para buscar patrones, pero sin saber a veces que debe cumplir con ciertos requisitos relacionados con su aspecto (la forma de la mano, cómo es cada uno de los dedos...) o con el número (5 dedos).

Si bien las caras pueden estar mejor logradas, el de las manos es uno de los aspectos que más llaman la atención de una imagen de persona falsa. Business Insider España ha utilizada una herramienta de IA (Stability - DreamStudio) para generar imágenes de un hombre adulto con barba y de una mujer adulta, sonriente, con pelo castaño y "manos bonitas", y en todas ellas las manos aparecen desfiguradas, raras o con dedos de más.

El fondo y las sombras

"Las imágenes generadas por IA suelen presentar algunos signos reveladores de que son falsas, por lo que es importante prestar mucha atención. Si el contorno de la persona está borroso, por ejemplo, o si pequeños detalles como las sombras no parecen reales, sabrás que la imagen no lo es", explica al medio británico Vonny Gamot, responsable senior de McAfee.

Al igual que la persona, las sombras que genera la inteligencia artificial también son falsas, ya que tampoco cuenta con iluminación real. Así, las sombras, el fondo y el contorno de la persona pueden ser señales que alerten de que la foto es falsa.

Lemonauta también recomienda fijarse en el fondo de una imagen para saber si está creada por IA: este suele estar desenfocado, pues el algoritmo tiene la finalidad de generar caras, mientras que en el resto de la escena pueden aparecer texturas confusas u objetos extraños.

El lenguaje

ChatGPT y otras herramientas de IA están entrenadas con una amplia combinación de textos que pueden retroceder hasta hace varios años o décadas, por lo que las palabras o las frases que emplean a veces pueden parecer sacados de otra época.

Si suenan extraños, poco naturales o anticuados y contienen frases cortas y repetición de términos, es posible que quien esté hablando contigo sea una inteligencia artificial, explica Daily Mail tras contactar con expertos como Thomas Platt, especialista en bots de Netacea.

"Si te preocupa que un delincuente pueda utilizar ChatGPT, debes tener en cuenta las limitaciones de la IA. Pregúntale sobre temas de actualidad, como qué echaron anoche en la tele. Estas IA están entrenadas con datos históricos, así que si le preguntas por el episodio de ayer de Love Island, será muy difícil", aconseja.

La fecha de activación de la cuenta

Si estás hablando en un chat online o en redes sociales con una persona y piensas que detrás podría haber una IA —o alguien manejando una IA—, puedes hacer dos cosas más, según los expertos.

Por un lado, pedirle que demuestre de alguna forma quién es —por ejemplo, con una videollamada—; por otro, mirar cuándo activó su cuenta: si se unió la semana pasada, podría tratarse de otra señal de alerta.

Otros detalles

La mujer de esta foto de arriba no existe, como tampoco es real esta otra. Además de lo mencionado, otros consejos para detectar imágenes de personas falsas creadas por IA implican observar partes del cuerpo como los dientes —sospecha si son demasiado perfectos y regulares—.

Evan Ratliff, redactor de Business Insider que ha perseguido a los 'falsos humanos' en internet, recomienda fijarse con detenimiento para empezar a notar "ciertas rarezas": una oreja más pegada, arrugas extrañas alrededor de un ojo, un pliegue tenue en una mejilla o un cuello de la camisa que sobresale mucho más por un lado que por otro.

Otros ejemplos que apunta Ratliff en personas falsas creadas por IA son de elementos como llevar un solo pendiente, tener más afeitado un lado de la cara que el otro o llevar unas gafas sin montura.

Por su parte, Lemonita apunta al encuadre de la foto, que suele ser el mismo y el típico de las fotos para documentos de identidad, y a que los protagonistas no suelen inclinar la cabeza ni rotarla.