5 señales de que eres adicto al trabajo y cómo ponerle solución

Mujer joven trabajando en oficina por la noche

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"Estaba completamente obsesionada con el trabajo", "Me di cuenta de que usaba el trabajo para bloquearme y evitarme", "A los 3 meses de haber empezado en un cargo gerencial, me salieron canas prematuras", "Mi nombre es JC y soy adicta al trabajo".

Esta persona sintió que no podía salir adelante, vio cómo le estaba afectando a su salud y acudió a una reunión de Workaholics Anonymous (Adictos al Trabajo Anónimos) para intentar ponerle fin. 

Es solo uno de los muchos casos de adicción al trabajo que pueden encontrarse en el mundo, desde España hasta Japón o Estados Unidos, y que puede tener consecuencias negativas en la salud mental y física y en las relaciones interpersonales.

Más de uno de cada 10 trabajadores padecen adicción al trabajo en España, según investigadores de la Universidad Jaume I de Castellón de la Plana. Y cerca del 8% trabajan más de 12 horas al día (60 a la semana), de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo, cuando, según la fuente, se considera que 45, 50 o 60 horas semanales de trabajo son un indicio de adicción, recoge elDiario.es.

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Sin embargo, la cantidad de trabajo o el número de horas dedicadas a este son apenas una parte del problema.

"Un adicto al trabajo es un individuo que se autodemanda trabajar de forma excesiva y tiene dificultad para regular sus hábitos laborales. Esto le lleva a limitar o eliminar casi por completo otras actividades de su agenda, así como prescindir del descanso y el ocio. En términos de salud mental se traduce en intranquilidad, ansiedad y depresión", explican desde Indeed.

Un adicto al trabajo es "una persona que trabaja obsesivamente duro de manera compulsiva", define Wilmar Schaufeli, profesor de psicología del trabajo y organizacional de la Universidad de Utrecht (Países Bajos) a BBC.

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El trabajo puede aportar beneficios más allá de los ingresos económicos, como autorrealización, sentimiento de pertenencia social, sentido de identidad, autoestima y legitimación (tanto frente a la familia o amigos como a la sociedad). El conflicto llega cuando se le da demasiada importancia.

"Hay una fracción de trabajadores que llega a dedicarle a su trabajo una excesiva cantidad de tiempo y de energía, llevándolo a cabo de forma muy intensa y compulsiva, lo cual tiene consecuencias negativas tanto sobre el trabajo como en su vida. Esto configura un trastorno que ha recibido distintas denominaciones y que se conoce como adicción al trabajo", explica un estudio.

La clave está en diferenciar entre dedicación al trabajo y adicción al trabajo, algo "necesario pero difícil" por 4 "motivos fundamentales", explica el artículo, publicado en SciELO, desarrollado en España por la Biblioteca Nacional de Ciencias de la Salud y el Instituto de Salud Carlos III.

Primero, por la no aceptación del problema por parte del laborodependiente. Segundo, porque las personas muy trabajadoras son alabadas dentro de la sociedad, porque la excesiva dedicación es considerada una cualidad. Tercero, por la falta de información y concienciación sobre la adicción al trabajo. Y, por último, por la no contemplación de la misma en los manuales de criterios diagnósticos.

Psicólogos, investigadores, estudios, plataformas laborales y otras fuentes señalan a una amplia variedad de posibles señales o síntomas de que una persona es adicta al trabajo, con un importante nivel de coincidencia en los elementos esenciales:

1. Demasiada dedicación al trabajo: poco descanso y deterioro de relaciones

Una mujer tiene una reunión mientras trabajada desde casa con un ordenador.

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La excesiva cantidad de tiempo y energía, aplicada de forma intensa y compulsiva, es una de las principales señales de adicción al trabajo

Eso implica estar conectado a cualquier hora del día, sin desconectar ni siquiera en fines de semana o vacaciones (en caso de que se las coja) y priorizar el trabajo sobre otras actividades (como aficiones o pasar tiempo con otras personas: pareja, amigos, familia), lo que puede provocar aislamiento, tensiones y relaciones deterioradas.

Se observa en una urgencia permanente por hacer cosas productivas y por un nivel desmedido de perfeccionismo. También por trabajar hasta altas horas de la noche, incluso estando enfermo; descansar poco; llevarse trabajo a casa; comer en el coche o el escritorio y tener el trabajo como principal tema de conversación.

2. No saber decir "no"

Una mujer y un hombre en una entrevista de trabajo.

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Alguien con adicción laboral nunca rechaza nuevos proyectos, clientes o responsabilidades en el trabajo. Simplemente no tiene el poder de decir "No" a más trabajo, señala como uno de los indicadores comportamentales el artículo de Scielo-ISCIII, a partir de lo analizado por varios autores.

Desde la sección de orientación laboral de InfoJobs explican que, si eres adicto al trabajo, sueles tener 3 "mandamientos sagrados: 'no digas no a tu jefe', 'no digas no sé' y 'nunca digas no puedo'".

3. Necesidad de tener el control

Mujer escribe en su iPad.

Ese perfeccionismo de los adictos al trabajo antes mencionado lleva a querer tener el control de cada cosa, de manera que no tiene la capacidad o voluntad de delegar y busca hacerlo todo.

InfoJobs lo define como complejo de Rey Midas, resumido en una frase: "Si no fuera por mí esto no habría salido bien". Este egocentrismo y voluntad de control como síntomas pueden desembocar en obsesión y horarios extendidos, pero también problemas en relaciones sociales, estrés y ansiedad.

4. Déficit de autoestima

Espejo

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Aunque pueda parecer lo contrario, detrás de ese egocentrismo y esa desconfianza en el trabajo de los demás no se encuentran niveles desbordantes de autoestima, sino un déficit de esta.

"El sentimiento de baja autoestima les conduce ansiosamente a la obtención de logros, que consiguen aumentar, pero solo transitoriamente, los sentimientos de valía personal", explican los expertos Javier Fernández-Montalvo y Enrique Echeburúa a ElDiario.es.

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Un 'trabajoadicto' o 'trabajólico' "necesita que le digan que es un 'trabajador dedicado', 'el más eficiente', 'el mejor empleado': basa en ello su autoestima", recoge el artículo Adicción al trabajo: características, detección y prevención desde una perspectiva integral como otra señal de adicción a trabajar.

Indeed lo llama "necesidad de reconocimiento externo": "Tiene dificultad para sentir satisfacción por el trabajo realizado. Es perfeccionista y necesita la aprobación de terceros. El éxito laboral condiciona su autoestima", explica.

5. Descuido de la salud

Un hombre con la pierna rota consulta su ordenador

"La obsesión de los adictos al trabajo es tal que pueden llegar a prescindir de sus horas de sueño y de sus relaciones con tal de lograr unos objetivos más que ambiciosos para su puesto de trabajo", advierten en Mundo Psicólogos.

Indeed habla de "hábitos descontrolados", como saltarse comidas, tener una dieta poco equilibrada o caer en otras adicciones (alcohol, tabaco, drogas).  

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La adicción al trabajo provoca insomnio o problemas para conciliar un sueño reparador y puede acabar desarrollando problemas graves de salud, alerta.

Cansancio extremo, mala nutrición, hipertensión, trastornos vasculares y cardiacos, úlceras, pérdida de cabello, estrés, ansiedad y depresión son otras de las posibles secuelas.

Cómo trabajar la adicción al trabajo

Además de por la observación de las anteriores señales o síntomas, hay otras formas de advertir la posibilidad de estar sufriendo adicción al trabajo. 

"La señal más evidente de que existe un problema es la negación. El adicto al trabajo pasa por alto todas las señales", advierte Indeed.

"El adicto (workaholic) llega a creer las justificaciones a las que recurre ante las quejas de su familia o de sus compañeros de trabajo y siempre encuentran una explicación a su exceso de trabajo", coincide Gayle Porter, autor de una investigación al respecto.

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Por eso, la ayuda debe venir, por un lado, desde fuera, por parte de amigos, familiares o colegas que interpreten esas señales. 

Pero, por otro, la persona adicta al trabajo también debe poner de su parte: "Ser capaz de identificar el problema, ver la adicción al trabajo como un obstáculo en la vida y reconocer los comportamientos asociados a la adicción" son algunas recomendaciones que propone la psicóloga Carola Salgado, del equipo de Doctoralia, en una conversación con Business Insider España.

Finalmente, también puede realizar un autoexamen sencillo (con afirmaciones o preguntas) que le dará pistas sobre su situación, como la Escala de bienestar al trabajo o la escala de adicción al trabajo de Bergen. 

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