Según una encuesta, la generación Z no confía en que sus datos personales estén seguros en internet y su mayor preocupación es que se filtren sus fotos.
Tras la explosión de ChatGPT, en España algunas empresas han empezado ya a interesarse por un potencial uso de IA que podría dar respuesta a muchas de sus preguntas.
Helen Taylor es una asistente virtual de 40 años que, tras trabajar durante años en Londres, se ha mudado recientemente a Asturias para teletrabajar desde allí.
Amazon ha dado instrucciones a sus empleados de que tengan cuidado con la información que comparten con ChatGPT, herramienta muy útil para muchos de ellos.
ChatGPT consigue aprobar 4 asignaturas de Derecho en EEUU tras sacar adelante raspado un examen de Historia de Selectividad en España: ya inquieta a los docentes.
Sridhar Ramaswany, CEO de Neeva: "Existe la posibilidad de que el mundo de las búsquedas dentro de 3 o 4 años tenga un aspecto muy diferente al actual" por la IA.
El Comité Europeo de Protección de Datos publica un borrador con nuevas directrices para frenar los carteles sobre 'cookies' más abusivos para los usuarios.
Google teme que empresas como OpenAI lancen herramientas basadas en IA que no han pasado todos los pertinentes controles, pero esto es algo que ya ha ocurrido.
Business Insider accede en exclusiva a datos agregados de la mayor encuesta de la historia a trabajadores de Amazon, que denuncian cómo la compañía afecta su salud.
Wallapop levanta 81 millones de euros en mitad de la crisis de financiación del sector tecnológico. Su objetivo es expandirse por los países del sur de Europa.
La IA generativa es el nuevo término tecnológico de moda. Las startups ya captan dinero utilizándola para todo tipo de cosas, desde crear contenidos a diagnósticos.
Business Insider España ha probado 4 de los más destacados detectores de textos generados por IA que se conocen hasta la fecha para conocer su efectividad.
OpenAI, la empresa detrás de ChatGPT, el procesador de texto por IA que ha causado furor desde hace meses, está probando una versión premium para monetizar su éxito.
Un estudiante de Princeton ha creado un programa que es capaz de detectar si un texto ha sido escrito por un ser humano o por una IA como la de ChatGPT.