Así es como la cirugía de alargamiento de piernas cambió mi vida: soy 10 centímetros más alto y me siento más carismático

Como orientador escolar, el trabajo de Ibrahim Alğan consistía en ayudar a los jóvenes a resolver sus problemas. Sin embargo, no podía resolver el suyo: un grave complejo de altura.

Alğan, de 30 años, es de la ciudad de Adana, en el sur de Turquía. Mide 1,70 y tenía un profundo sentimiento de inferioridad debido a su estatura.

"Si eres más bajo, la gente no te toma tan en serio como a una persona alta", declara a Business Insider. Este joven sentía que no tenía la confianza suficiente para ayudar a los alumnos de su escuela.

"Creo firmemente que el carisma es una de las características imprescindibles del liderazgo", afirma. "Cuando te falta, empiezas 1-0 abajo".

Alğan relata que sus compañeros hacían bromas sobre su estatura al menos una vez a la semana. Dijo que sentía que las personas altas a su alrededor eran más populares y tenían más oportunidades. "Tenían más ventajas tanto en las relaciones privadas como en la contratación", asevera.

Entre los recuerdos que más lo marcaron, jamás olvidó a su primera novia diciéndole que desearía que fuera más alto. Los comentarios despectivos a lo largo de su vida nunca se han borrado. "Siempre han permanecido como una herida en mí".

Así que investigó métodos que prometían ayudar a una persona a ser más alta. Tomó polvos y pastillas para aumentar su estatura. Jugó al baloncesto, nadó y saltó.

"Me colgaba de una barra minutos antes de irme a dormir casi todas las noches", cuenta. "Utilicé plantillas reflexológicas que decían estimular el aumento de estatura".

Nada funcionó, salvo unos zapatos con tacón oculto que le hicieron parecer hasta 5 centímetros más alto. Pero no fueron suficientes. "Era como un falso sueño", dice. "Cada vez que me quitaba los zapatos, me enfrentaba de nuevo a la realidad.

"Mi obsesión era cada día mayor".

Su propósito de vida

Después de dos rondas de cirugía de alargamiento de piernas, Alğan añadió 10 centímetros a su altura.

No le contó a nadie que se había sometido a su primera operación en febrero de 2015, pensando que no lo entenderían.

La primera operación le hizo 5 centímetros más alto. Cuando la gente se dio cuenta, mintió diciendo que tenía una deformidad ósea y que necesitaba cirugía para rectificarla. 

Se sometió a una segunda operación en marzo de 2020 que añadió otros 5 centímetros a su estatura.

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La operación cambió tanto su perspectiva que dejó su trabajo de consejero y fundó su propia clínica en Turquía que ofrece cirugía de alargamiento de piernas. Él es el coordinador jefe, y su equipo está formado principalmente por otras personas que se han operado.

"Me di cuenta de que en Turquía había muchas personas que deseaban someterse a esta operación, pero no había muchas opciones para consultar o incluso obtener más información sobre el proceso de alargamiento de piernas", explica. 

Su clínica, Wanna Be Taller, cobra entre 23.850 y 51.850 dólares —entre 22.300 y 48.000 euros— dependiendo de si el paciente desea crecer 5, 10, 15 o 18 centímetros.

Antes de operarse, no pensaba en montar un negocio de alargamiento de piernas. "Mi único objetivo, o incluso podría llamarlo el propósito de mi vida, era ser más alto".

Un nuevo grupo de pacientes

La cirugía de alargamiento de piernas ha sido un tema candente en los últimos meses. Inicialmente, se utilizaba para tratar a personas con piernas de distinta longitud, pero ahora la utilizan pacientes que quieren ser más altos.

Kevin Debiparshad, cirujano formado en Harvard y conocido como uno de los mejores del mundo en alargamiento de piernas y extremidades, explica que la intervención consiste en cortar los huesos de la pierna, ya sea el fémur (el hueso de la parte superior de la pierna) o la tibia (el hueso de la parte inferior de la pierna).

"Hago de 4 a 6 pequeñas incisiones en la pierna, creando una ventana para acceder a la parte hueca del hueso, donde inserto un dispositivo que responde a un mando a distancia externo que el paciente controlará en casa", detalla Debiparshad.

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El paciente se sirve del mando a distancia para aumentar su estatura un milímetro al día siguiente de la intervención, en un proceso que suele ser indoloro.

Tal y como relata a Business Insider, la mayor cobertura mediática y la reducción del estigma que rodea a los procedimientos estéticos han abierto la intervención a un nuevo grupo de pacientes.

"Tradicionalmente, la mayoría de mis pacientes son hombres jóvenes de baja estatura que desean aumentar su estatura. Sin embargo, ahora vemos muchos pacientes de más edad, personas de estatura media, mujeres e incluso personas que desean someterse a una operación de reducción de estatura", explica. 

"Este último grupo incluye a personas que están en transición de género y quieren que sus cuerpos se alineen mejor con cómo se perciben a sí mismos".

"Ahora puedo verme como un adulto de verdad"

Alğan afirma que su vida ha cambiado "radicalmente" desde que es más alto. 

"Cuando me pongo un traje, antes me sentía como un niño, pero ahora puedo verme como un adulto de verdad", señala. "Oigo más la frase 'este traje te sienta bien', y me afecta positivamente en muchos aspectos de mi vida".

Le gusta no tener que levantar la vista cuando habla con la gente, y le permite "pensar de forma más sana y así tomar mejores decisiones".

Dice que su nuevo trabajo al frente de la clínica tiene similitudes con su antiguo papel de consejero: "Apoyo a las personas que tienen dificultades psicológicas para crecer más".

"La gente ya no hace bromas sobre mi estatura", apunta. "Como líder, no creo que haya nada más valioso que la confianza en uno mismo, y ahora la tengo".