El servicio de internet por satélite de SpaceX, Starlink, ha permitido que los cortes en las comunicaciones provocados por la guerra en Ucrania sean menos graves y no afecten tanto a la población en general y a los militares en particular. 

Elon Musk, director general de SpaceX, activó el servicio de internet por satélite en Ucrania después de que un responsable del gobierno ucraniano se lo pidiese tras la invasión rusa. La guerra provocó desde un primer momento cortes en los servicios de internet ucranianos, unos problemas que Musk se comprometió a solventar personalmente. 

De ese modo, el fundador y CEO SpaceX, compañía que desarrolla el servicio de internet satelital Starlink, ofreció cobertura a Ucrania con el fin de que su ejército le pudiese hacer frente a Putin. Musk puso en ese momento a disposición de los militares ucranios hasta 50 satélites que ofrecían servicio de internet y les permitían comunicarse. 

"No existe comunicación con el mundo exterior sin Starlink", aseguró en junio Alisa Kovalenko, una de las militares que ha utilizado el servicio de internet satelital para confrontar los ataques del ejército ruso. 

20 millones de dólares cada mes

"SpaceX pierde unos 20 millones de dólares al mes por el coste del servicio y los gastos relacionados con las medidas de seguridad mejoradas para la defensa contra la guerra cibernética, pero seguiremos haciéndolo", ha reconocido ahora el fundador y CEO de SpaceX a través de su cuenta de Twitter. 

Musk ha recalcado que su compañía no está recibiendo ningún tipo de financiación del departamento de Defensa estadounidense por proveer este servicio en Ucrania, pero ha indicado que, aun así, seguirán ofreciéndolo. 

El pasado viernes, 14 de octubre, el CEO de SpaceX afirmó que su compañía no podía seguir afrontando en exclusiva los costes de prestar este servicio a la población ucraniana. Sin embargo, al día siguiente él mismo utilizó su perfil en Twitter para desdecirse y señalar que Starlink seguiría estando disponible en Ucrania. 

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El despliegue de Starlink en Ucrania, como casi todo lo que rodea a Musk, no ha estado exento de polémicas. Conforme los militares ucranianos han ido avanzando y recuperando territorios ocupados por el ejército ruso, han denunciado cortes "catastróficos" del servicio. 

Algunos expertos aseguraron entonces que estos cortes podían deberse a los esfuerzos de SpaceX para que los hombres de Putin no tuviesen acceso al servicio de internet satelital. 

La semana pasada también se supo que Musk había denegado la petición de Ucrania de desplegar Starlink en Crimea por miedo a que se desencadenase una guerra nuclear.