Lo que le pasa a tu cuerpo si vas a la sauna todas las semanas

Sauna finlandesa

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  • Si acudes regularmente a la sauna, reducirás tu riesgo de enfermedades cardiovasculares, hipertensión, accidentes cerebrovasculares o enfermedades neurocognitivas.
  • También aliviarás el dolor, mejorarás tu estado de ánimo o mejorarás la calidad de tu sueño, entre otros muchos beneficios.

La sauna es toda una religión en Finlandia: como ilustraba recientemente el diario El País, la región nórdica cuenta con 3,3 millones de saunas para 5,5 millones de habitantes. Hagan cuentas. Sin embargo, no te hace falta volar al "país de los mil lagos" para disfrutar de esta ancestral tradición, considerada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad como la pizza napolitana o la comida tradicional mexicana.

La sauna finlandesa típica es la seca, que se calienta con madera y piedras de sauna y se caracteriza por altas temperaturas y niveles bajos de humedad. La temperatura media ideal es de 90º y la humedad no supera el 20%. También existen las saunas de vapor, también llamadas saunas turcas, que proporcionan calor húmedo, con temperaturas en 45 ºC y 55 ºC y humedad relativa del 100%.

Seguramente te hayas relajado en su interior en alguna ocasión, dejando que el calor seco y embriagador de la sauna te envuelva. Al salir, una sensación de calma y relajación inunda tu organismo. Pero más allá de la experiencia, ¿conoces los beneficios de acudir regularmente a la sauna?

Corazón, cerebro, piel o defensas: los superpoderes de la sauna

Varios estudios recapitulan las ventajas de la sauna, que es toda una impulsora de la buena salud del corazón. Un informe publicado en JAMA Internal Medicine revela que puede ayudar a las personas con problemas cardíacos a extender su esperanza de vida, reduciendo el riesgo de accidentes cerebrovasculares y ataques al corazón.

¿Por qué la sauna es tan beneficiosa para el corazón? Las investigaciones revelan que dilata los vasos sanguíneos y aumenta la frecuencia cardiaca a unos 110 o 120 pulsaciones por minuto. Fisiológicamente, al igual que el ejercicio, la presión arterial sube, pero a largo plazo brida como resultado un mejor control y una disminución de la presión arterial, como demuestra la evidencia.

También es una herramienta clave para la recuperación muscular después de un entrenamiento o para aliviar el dolor articular, la rigidez y los dolores de cabeza tensionales. La sudoración contribuye a la eliminación del ácido láctico y otras toxinas como plomo, cobre, zinc, níquel, mercurio y otros productos químicos, mientras que el calor intenso ayuda a la liberación de endorfinas, una de las hormonas de la felicidad.

Para tu cerebro la sauna también es pura medicina: un estudio de 25 años realizado con más de 2.300 participantes en la Universidad del Este de Finlandia reveló que el uso regular de la sauna (de 4 a 7 veces por semana) a 97 grados durante 19 minutos redujo el riesgo de alzhéimer y demencia.  De hecho, la Alzheimer´s Association incluye el calor como forma de mejorar la salud cerebral.

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La salud mental se ve beneficiada: la sauna permite regular los niveles de cortisol en sangre, la hormona del estrés que se dispara en los estados de alerta, y estimular la serotonina. En concreto, la sauna puede reducir el cortisol entre un 10 y un 40%, según un estudio reciente publicado en Medical Principles and Practice.

Otro análisis publicado en el International Journal of Environmental Research and Public Health concluye la exposición regular al calor de la sauna puede beneficiar a la reducción de ansiedad en las personas con estrés crónico. Otros estudios relacionan acudir regularmente a la sauna con un menor riesgo de psicosis.

Si quieres dormir mejor, la sauna será tu mejor aliada para conseguir un sueño más profundo, regular la temperatura corporal y alcanzar un estado de calma. Un estudio reciente publicado en Complementary Therapies in Medicine señala que el 83,5% de los encuestados informaron una mejoría del sueño después de usar una sauna.

Y además de rendirte en los brazos de Morfeo, fortalecerás tu sistema inmune, ya que se ha comprobado que ayuda a producir más glóbulos blancos, así como a aliviar la congestión nasal de alergias y resfriados.

También es buena para regular el peso, quemar grasas y acelerar el metabolismo. Según una investigación médica del ejército de Estados Unidos, una persona con una condición física moderada puede sudar fácilmente 500 gramos en una sauna en una sola sesión, consumiendo casi 300 calorías en el proceso. 

Para la piel son mágicas: la limpia, reemplaza las células muertas y el sudor elimina las bacterias de la capa epidérmica y de los conductos sudoríparos. A su vez, la limpieza de los poros mejora la circulación capilar. También se ha demostrado que el uso de la sauna disminuye los niveles circulantes de marcadores inflamatorios.

Cómo sacarle el máximo partido a la sauna

Los especialistas recomiendan que las sesiones sean cortas y aumentar progresivamente la tolerancia al calor en el tiempo. Como máximo, se recomienda limitar a 15 o 20 minutos la visita diaria a la sauna.

En cuanto a la frecuencia, los estudios demuestran mayores beneficios con un uso más frecuente: 3 o 4 días o más por semana dieron como resultado los máximos beneficios. 

Recuerda mantenerte adecuadamente hidratado, llevar un bañador holgado o solamente una toalla limpia de algodón, evitar hacer ejercicio o hablar en exceso, salir de la sauna si sientes mareos, náuseas o debilidad, y no entrar con lentillas, ya que podrían dañarse con el calor.

Aunque es muy beneficiosa, no está hecha para todo el mundo: según Visit FInland, los recién nacidos y las personas con graves problemas de salud —como heridas abiertas o problemas del corazón— deben evitar la sauna.

Si tienes problemas venosos crónicos, varices en fase aguda, has sufrido algún infarto cerebral, tienes hipertensión arterial de origen renal, glaucoma, hipotiroidismo, enfermedad inflamatoria aguda, hongos o un episodio de fiebre, no bayas a la sauna. Las mujeres embarazadas, con tensión arterial baja o durante la menstruación, también deben tener precaución.

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