¿Qué pasa si comes pollo todos los días?

Comer pollo

Getty Images

  • El pollo es una buena fuente de proteínas animales de alto valor biológico, vitaminas del grupo B y minerales como calcio, hierro, zinc, sodio, potasio y magnesio.
  • ¿Es bueno comer pollo todos los días? Estos son los beneficios y contraindicaciones de consumir esta carne magra con una frecuencia muy elevada.

El consumo de carne fresca de pollo en España experimentó un decrecimiento de casi 73 millones de kilogramos en 2021, quedando a cierre de año en torno a los 558 millones. De todos modos, sigue siendo la carne más consumida: el año pasado fueron 12 kilos de pollo por persona: 13,6 en 2020, según Statista. Cada español come cerca de 50 kilos de carne al año, recoge Maldita.

¿Cuán bueno es el pollo? ¿Es bueno comer pollo todos los días o pueden aparecer deficiencias nutricionales y problemas de salud? Business Insider España analiza los beneficios, las contraindicaciones y el perfil nutricional de una de las proteínas más presentes en los hogares españoles por su precio, versatilidad y calado en la gastronomía de nuestro país. 

Esta es la composición nutricional del pollo

El pollo destaca especialmente por aportar proteínas de alto valor biológico, ya que contiene los 9 aminoácidos esenciales para el organismo: histidina, isoleucina, leucina, lisina, metionina, fenilalanina, treonina, triptófano y valina. 

Además, el pollo es rico en una variedad de nutrientes importantes, como niacina, selenio y fósforo. Es bajo en colesterol, excepto si se ingiere la piel, ya que esta parte tiene un elevado contenido en grasas.

Los datos de la Federación Española de Nutrición destacan la buena valoración nutricional del pollo.

 

 "Se puede considerar una carne magra, sobre todo cuando se consume sin piel donde reside una parte importante de la grasa. La grasa es mayoritariamente grasa monoinsaturada constituida principalmente por ácido oleico, seguida de la grasa saturada, representada sobre todo por el ácido palmítico", anota el documento de la FEN. 

Las principales vitaminas presentes en el pollo son del grupo B, destacando la niacina y la vitamina B6. Una ración de pollo aporta el 73% y 97% respectivamente de las ingestas recomendadas de niacina para hombres y mujeres de 20 a 39  años que practican actividad física de forma moderada.

No obstante, la FEN no aboga por el consumo diario de pollo y remite a las actuales recomendaciones nutricionales, que aconsejan el consumo de 3 raciones a la semana de carnes magras, alternando el consumo entre distintos tipos entre los que se encuentra el pollo.

Beneficios de comer carne de pollo a menudo

Pechuga de pollo

Pixabay

El consumo de pollo puede ser positivo si respetas la frecuencia recomendada. Estos son los principales beneficios de esta carne blanca, avalados por la ciencia.

  • Aporte de proteínas de alta calidad: Según Medline Plus, las proteínas sirven para ayudar al cuerpo a reparar tejidos y producir células nuevas. La proteína también es importante para el crecimiento y el desarrollo, el mantenimiento de la musculatura o un buen sistema inmune. Aproximadamente el 22% del pollo es proteína. 
  • Mejora la salud de tus huesos: La proteína del pollo no solo es buena para los músculos, sino también para los huesos, contribuyendo a prevenir la pérdida de masa ósea, estrechamente relacionada con la osteoporosis.
  • Es bueno para tu memoria: Al igual que otros alimentos de origen animal como el huevo, el pollo aporta colina, un nutriente que interviene en la memoria y otras funciones cerebrales. Estudios apuntan a que las dietas ricas en colina obtienen mejores resultados en las pruebas cognitivas. También es una carne magra rica en B12, esencial para el cerebro y el sistema nervioso.
  • Ayuda a tu estado de ánimo: El pollo contiene triptófano, un aminoácido que contribuye a aumentar los niveles de serotonina de tu organismo. Esta es una de las llamadas hormonas de la felicidad,, cuyos bajos niveles se han relacionado con la depresión. El triptófano también es uno de los nutrientes más importantes para dormir bien.  

El pollo también puede ayudarte a evitar la anemia, reducir la fatiga, mejorar tu salud cardiovascular o  a mantener un buen metabolismo

El pollo también es un buen alimento para los ojos: su alta cantidad de derivados de la vitamina A como retinol, alfa y betacaroteno o licopeno proporcionan a tu organismo una salud visual adecuada.

¿Debes comer pollo todos los días?

Pollo asado

Pixabay

La respuesta corta es no, y por varios motivos. Las razones son nutricionales, pero también ambientales. El pasado verano, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) aprobó en su Comité Científico el informe con las nuevas recomendaciones dietéticas sostenibles y recomendaciones de actividad física para la población española.

En esta nueva guía se recomienda un consumo máximo de 3 raciones semanales de carne —preferentemente blanca, de aves y conejo—. Este consumo equivale a entre 300 y 375 gramos de carne a la semana, atendiendo a las directrices de la comunidad científica internacional. 

No deberías comer carne roja si perteneces a uno de estos 4 grupos de personas

No obstante, España está muy lejos de esa cifra y presenta un consumo cárnico excesivamente elevado: se come casi el triple de lo que pide la AESAN, según los datos de 2021 del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Los datos de la FAO hablan de un consumo de 275 gramos diarios, ocupando el primer puesto en consumo de carne en la Unión Europea.

Además, a nivel nutricional comer demasiado pollo presenta las siguientes desventajas: 

  • Carencias de nutrientes: Al comer demasiada cantidad de un alimento, reduces la variedad y diversidad en tu dieta, y por tanto, puedes sufrir deficiencias nutricionales. Deberías variar y consumir otras fuentes de proteína como legumbres, pescado, marisco, seitán, algas, quinoa o huevos.
  • Podrías consumir demasiada proteína: Este macronutriente debe suponer entre el 10% y el 35% de la ingesta calórica diaria. Un adulto sano suele requerir entre 0,8-1,0 gramos de proteína por kilogramo de peso corporal. Demasiada proteína elevará tus niveles de lípidos en sangre y tu almacenamiento de grasa. 
  • Colesterol alto y riesgo más elevado de cardiopatías: Si comes el pollo con piel o lo acompañas de salsas grasas y de sodio podrías tener un riesgo mayor de colesterol malo elevado e hipertensión arterial.
  • Problemas para regular tu peso: Pasarte con las proteínas de origen animal, especialmente procesados, embutidos y carnes, puede dificultar el mantenimiento de un peso saludable. Según varios informes, en comparación con los vegetarianos, las personas que consumen carne de pollo a diario tienden a tener un IMC mayor.
  • Mayor riesgo de intoxicación alimentaria: Es importante cocinar el pollo hasta el final y no contaminar otras superficies y alimentos tras tocar el pollo crudo, ya que existe peligro de salmonela o campilobacteriosis. 

Aboga por un consumo responsable y controlado de pollo, por combinar esta carne de ave con otras fuentes de proteína animal o vegetal y cocinarlo de la forma más saludable posible: a la plancha, cocido, al vapor o asado y al horno son mejores opciones que frito o rebozado.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.