El crecimiento del PIB y el déficit público cierran 2018 mejorando las expectativas del FMI y el Banco de España

Un trabajador revisa una línea de embotellado de aceite de oliva en una planta de Dos Hermanas (Sevilla)
  • Los datos de crecimiento del PIB y de déficit público publicados este viernes muestran que la economía española cerró 2018 mejor de lo esperado.
  • El PIB español creció un 2,6%, es decir, 4 décimas menos que en 2017 y su menor alza desde 2014, pero superando las expectativas del FMI, el Banco de España y el propio dato adelantado del INE.
  • El déficit del conjunto de las administraciones públicas cerró el año pasado en 31.805 millones de euros, el equivalente al 2,6% del PIB, lo que supone una décima menos de lo previsto por el Gobierno.
  • La mejora del objetivo de déficit público en 2018 permitirá que España salga este año del procedimiento de déficit excesivo de la UE y deje de ser el único país de los 28 sometido a este control presupuestario.

Puede que parezca un poco extraño decirlo ahora, pero 2018 ha sido mejor año para la economía española de lo esperado. El año pasado concluyó confirmando los temores a una desaceleración del crecimiento mundial y en pleno desplome global de las bolsas, pero los últimos datos macroeconómicos oficiales confirman que, de nuevo, España ha vuelto a salir prácticamente indemne de las turbulencias internacionales.

De este modo, se disipan en parte las expectativas más agoreras sobre la economía española, en línea con la corrección al alza que han experimientado este último mes las previsiones de los principales organismos y analistas. Así, la semana pasada el Banco de España mantenía sus pronósticos de crecimiento hasta 2021, asegurando que en el primer trimestre de 2019 el PIB creció mejor de lo esperado.

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España sigue, por lo tanto, liderando las estadísticas de crecimiento de la Unión Europea, en un escenario en el que Italia ha entrado en recesión y la industria de Alemania parece seguir el mismo camino. Sí, la economía nacional ya no crece con la fortaleza de los últimos años, pero su ralentización no es tan drástica como la que experimenta Francia, por ejemplo.

Estos son los factores que definen cómo consiguió la economía española cerrar el año pasado con mejores números de lo previsto, según los datos de la Contabilidad Nacional Trimestral y de las Cuentas Trimestrales no Financieras de los Sectores Institucionales que ha publicado este viernes el Instituto Nacional de Estadística.

El PIB ha crecido una décima más de lo esperado, confirmando la estimación del Gobierno

Crecimiento interanual del PIB en los últimos 4 años

La ralentización de la economía española, tal y como habían pronosticado las principales instituciones económicas a lo largo de los últimos meses, parecía confirmarse en enero, cuando el Instituto Nacional de Estadística publicó los datos provisionales de la Contabilidad Nacional Trimestral. Este viernes, sin embargo, el INE corrige al alza una décima sus previsiones y confirma que el PIB creció un 2,6%.

Estadística ha justificado esta mejora por "una aportación menos negativa del sector exterior de lo inicialmente estimado". De este modo, ese 2,6% de crecimiento coincide con las previsiones del Gobierno y supera las del FMI, el Banco de España, el Panel de Funcas o la Airef. Y todo ello, a pesar de que es 4 décimas menor que el avance de 2017 y el dato más bajo de crecimiento desde 2014.

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La renta nacional crece por el aumento de las remuneraciones y del número de asalariados

Renta nacional bruta y renta nacional disponible en los últimos 9 años

El INE destaca que "la remuneración de los asalariados presenta un crecimiento interanual del 4,4% en el cuarto trimestre, tasa una décima superior a la del trimestre anterior". Atribuye este dato al alza de un 3,2% en el número de asalariados en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo y por la subida de un 1,1% en la remuneración media por asalariado.

Todo ello, sumado al saldo de las rentas primarias y a las transferencias corrientes con otras economías, se refleja tanto en la renta nacional bruta como en la renta disponible bruta, que avanzan en torno a un 1% cada una y mejoran los datos de trimestres anteriores. Sin embargo, en una lectura más amplia, en términos anuales, ambos datos muestran caídas de 2 y 6 décimas.

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La demanda nacional se mantiene por el avance del consumo y compensa la caída de la demanda externa

Demanda interna y externa de España

En datos anuales, la demanda nacional aporta 2,9 puntos al crecimiento del PIB de 2018, mientras que la demanda externa le resta 3 décimas. Si comparamos con el trimestre anterior, los datos son similares, con una aportación interna es de 2,5 puntos y la externa de -2 décimas.

Este dato demuestra la fortaleza del consumo de los hogares, que cierra 2018 con su quinto ascenso anual consecutivo gracias a un repunte del 2,3%, que es, no obstante, una décima menor que la de 2017 y amortigua la ralentización que ha sufrido en el último trimestre. Por su parte, la inversión ha mejorado 4 décimas su crecimiento respecto a 207, hasta el 5,3%, aunque también se frenó entre octubre y diciembre de 2018.

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La caída del déficit público permite cumplir los criterios de Bruselas por primera vez desde la crisis

Evolución del déficit público desde 1999

España es el único país de la UE que todavía está sometido al procedimiento de déficit excesivo. Sin embargo, este mismo año podría abandonar este órgano correctivo de Bruselas debido a la reducción del déficit del conjunto de las administraciones públicas, que cerró el año pasado en 31.805 millones de euros, lo que equivale al 2,6% del PIB, cinco décimas menos que en 2017.

Hay que recordar que el Gobierno ha sido incapaz de elevar la meta de déficit para 2019 hasta el 1,8% del PIB, por lo que permanece el objetivo que fijó el Ejecutivo de Mariano Rajoy, del 1,3% y, a la vista de los resultados de 2018, parece una meta de difícil cumplimiento, especialmente si se tiene en cuenta que todavía no hay unos presupuestos para este año ni los habrá al menos hasta después de las elecciones de abril.

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