¿El futuro de Tesla? Elon Musk podría tener este as bajo la manga

Las últimas cifras del informe de inversores de Tesla son algo confusas. Por un lado, se han vendido menos coches que en el trimestre anterior. Pero Tesla no es la única. BYD también vendió ligeramente menos coches en el primer trimestre de 2024. 

Por otro lado, Tesla fue el fabricante que más coches eléctricos vendió en todo el mundo, desplazando a BYD al segundo puesto. Pero hay algo que parece extraño.

Tesla ha producido alrededor de 50.000 coches más de los que la compañía ha vendido.

Al mismo tiempo, Tesla señala en el informe que las cifras han bajado porque la compañía sufrió el bloqueo en el mar Rojo y el fallo de la gigafactoría de Berlín. Hay algo que no cuadra, porque sin los parones se habrían fabricado hasta 100.000 vehículos en total.

Pero incluso más allá de las incoherencias, Tesla parece haber llegado lentamente al final de su empinadísima curva de crecimiento. La política del coche único (casi el 90% de todas las ventas corresponden al Tesla Model 3 y Model Y) podría causar problemas en el futuro. Los beneficios del año pasado en bolsa han vuelto a desaparecer porque los inversores se están volviendo lentamente escépticos.

La competencia aumenta la presión

Además, los competidores de Tesla tampoco se duermen. Puede que Estados Unidos siga ofreciendo los mejores coches eléctricos, pero la UE y China están siguiendo su ejemplo. Hay varias ofertas competitivas, sobre todo en el segmento del Tesla 3. 

Los fabricantes alemanes también están ganando impulso poco a poco, especialmente Volkswagen. Tras el difícil inicio del ID3, han aprendido lo que tienen que hacer mejor. El ID2, previsto para 2026, también debería superar al Tesla 3 en precio. 

Luego están los coches eléctricos de Renault, que ha anunciado tres coches —el Twingo, el R5 y el R4— que causarán sensación en el mercado. BYD también seguirá presionando a Tesla.

El problema de Tesla no es que se haya quedado atrás tecnológicamente. Si nos fijamos en la autonomía que puede alcanzar un Tesla con la energía de la batería, Tesla sigue estando por delante. La competencia tampoco puede seguir el ritmo con el software del sistema de infoentretenimiento. 

Solo los sistemas de Mercedes y BMW ofrecen algo similar aquí. Además, la empresa sigue estando en una buena posición financiera. Con una reserva de efectivo de unos 20.000 millones de euros, puede pagar los préstamos actuales y encargar más gigafábricas.

Sin embargo, el talón de Aquiles de Tesla es y sigue siendo su enfoque en el Tesla Model 3 y en el Model Y. Si las ventas se desploman aquí, Elon Musk se enfrentará a un problema. La expectativa general era, por tanto, que Tesla ofrecería un nuevo modelo a un precio de entre 25.000 y 30.000 euros en los próximos años. 

Esto se debe a que el resto de fabricantes disponen de una gama mucho más amplia de coches eléctricos. Sin embargo, el tantas veces mencionado Tesla 2 no llegará pronto al mercado. En su lugar, Musk quiere presentar su primer robotaxi en agosto.

Tesla despide a más del 10% de su plantilla a nivel mundial, según un correo interno de la compañía

El robotaxi debería arreglar las cosas

Aunque el mercado bursátil respondió al anuncio con una ligera subida del precio de las acciones, es poco probable que la introducción de un robotaxi facilite la vida a Tesla. 

Además de la cuestión de si el coche puede manejarse de forma totalmente autónoma, es decir, sin conductor, y si es seguro, está también la de que no hay base legal para la autorización masiva de robotaxis en todo el mundo. Aunque circulan por algunas ciudades y barrios, aún no hay leyes que permitan su autorización general.

Sin embargo, Elon Musk es una de esas personas que piensan menos en lo que está permitido hoy y más en lo que tendrá demanda en el futuro. Las inversiones de Musk en PayPal en los años 90 y sus otras inversiones en SpaceX y Tesla han demostrado que puede hacer que las cosas tengan éxito porque es capaz de predecir las tendencias futuras con más tiempo que la competencia. 

No hay duda de que los robotaxis están al caer. Sin embargo, cabe preguntarse si Musk no se ha adelantado entre cinco y diez años.

Así que Tesla vuelve a apostar por el futuro, pero el peligro es que Musk descuide demasiado el presente. Aunque la demanda de coches eléctricos aumente en todo el mundo y haya espacio suficiente en el mercado, el Tesla 3 no bastará por sí solo para asegurar el futuro de la empresa. Por tanto, no sería de extrañar que Tesla entrara en una fase de estancamiento en los próximos años.