17 razones por las que podrías estar deteriorando tu capacidad de memoria

"Vienen muchas pacientes de 30 años que dicen tener demencia, cuando en realidad son madres treintañeras de 3 hijos con un trabajo a tiempo completo", señala a Prevention Stephanie S. Faubion, directora del Centro para la Salud de la Mujer de Mayo Clinic.

Tus rutinas de trabajo, hobbies y hasta las pastillas que tomas para relajarte podrían estar influyendo en tu capacidad de atención y de retención de información. También haber pasado el COVID-19, como puedes leer aquí.

Pero, lejos de la maternidad y un trabajo a tiempo completo, otros malos hábitos impactan negativamente en la salud de tu cerebro.

"Uno de los hábitos que no nos damos cuenta que no nos sientan nada bien, es el abuso de las pantallas. Sobre todo en el tiempo que pasamos con el móvil. ¿Por qué? Porque es muy difícil tener una concentración plena si estamos abusando de la concentración de las pantallas", señala la terapeuta, coach y CEO de El Animal Emocional, Ana Sánchez-Anegón.

"La multitarea es un mito: tienes que hacer lo que estás haciendo y luego pasar a lo siguiente", insiste la Dra. Faubion al medio.

"El hacer una única cosaes muy útil para el cerebro, centrar la atención y la salud mental en general", añade la terapeuta en un reportaje sobre la salud del cerebro de Business Insider España.

Estas son 17 de las actividades o estados mentales que pueden estar deteriorando tu memoria, sin que estés sufriendo una enfermedad neurodegenerativa.

Estás estresado o ansioso constantemente

"Cuando tienes demasiadas pelotas en el aire o estás quemando una vela por ambos extremos, los niveles de cortisol se elevan", explica también a Prevention el neurólogo Ronald Petersen, director del Centro de Investigación de la Enfermedad de Alzheimer de Mayo Clinic.

Esta hormona del estrés sirve muchas veces para mantenerte alerta y preparado. Pero también afecta el hipocampo y otras partes del cerebro que están involucradas en la memoria.

"Cuando el nivel de ansiedad es alto, no puedes concentrarte en nada y tu atención se ve afectada. Se siente como un trastorno de la memoria porque no puedes centrarte en nada", describe la Dra. Faubion.

Viajas demasiado

No tanto por el estrés que supone hacer escalas entre vuelos, transbordos de tren o hacer frente a una cancelación de última hora. Viajar demasiado —sobre todo entre países con mucha diferencia horaria— podría afectar a tu memoria objetiva a corto plazo y la cognición abstracta. 

Según una investigación realizada por la Universidad de Bristol, Inglaterra, estos viajeros podrían sufrir una "atrofia del lóbulo temporal y déficits cognitivos espaciales".

Estás pendiente de varias tareas a la vez

A lo que las expertas citaban con anterioridad, se suman evidencias científicas que han encontrado que las personas que "son bombardeadas" regularmente con múltiples flujos de información digital, tienen problemas más pronunciados para recordar información y prestar atención en comparación con los que hacen una sola cosa cada vez.

"A los que realizaban muchas tareas les iba cada vez peor a medida que avanzaban porque seguían viendo más letras y tenían dificultades para mantenerlas ordenadas en sus mentes", describen los investigadores de la Universidad de Stanford (Estados Unidos).

Lo buscas todo en Google

¿Cuántos números de teléfono te sabes ahora mismo? ¡Sin consultar tu lista de contactos! ¿Y las medidas de las recetas? ¿Y las calles paralelas o perpendiculares de tu nuevo piso de alquiler o restaurante favorito?

Te pasas todo el día consultando en Google, en tu teléfono móvil o a tus amigos y familiares por WhatsApp aquellas cosas que no sabes o te suenan vagamente. 

8 trucos para mejorar radicalmente tus búsquedas en Google

Y esto afecta a tu capacidad de retención de información:

"Los resultados de 4 estudios sugieren que, cuando se enfrentan a preguntas difíciles, las personas están preparadas para pensar en los ordenadores y que, cuando las personas esperan tener acceso a la información en el futuro, tienen menores tasas de recuerdo de la información en sí y, en cambio, mayor recuerdo de dónde acceder a ella", sugiere una revisión publicada en Science.

Comes demasiada azúcar

Una mayor ingesta de azúcar parece estar asociada con una función cognitiva más baja, de acuerdo con una investigación publicada por British Journal of Nutrition.

De facto, tal y como había informado Business Insider con anterioridad, las dietas compuestas principalmente de azúcar y alimentos procesados

promueve la inflamación en el cerebro, lo que puede conducir a la pérdida de memoria a corto plazo.  

Bebes poca agua

Los participantes que se hidrataron antes de las pruebas cognitivas reaccionaron más rápido que los que no bebieron agua antes en un estudio publicado en Frontiers.

Según hallazgos divulgados por Journal of Biological Chemestry, esta funciona como un amortiguador que mejora la concentración y la cognición.

Te sientes deprimido

Varios estudios han encontrado vínculos entre la capacidad de memoria y la depresión. 

Uno de ellos, publicado en Psychological Medicine, encontró que las personas que no tenían depresión, reportaban más problemas de memoria cuantos más síntomas depresivos presentaban. Otra investigación anterior del mismo medio demostró que hay un vínculo entre la depresión y las deficiencias cognitivas. 

Y uno de los trabajos divulgados por The British Journal of Psychiatry puso en evidencia que incluso sufrir una depresión a temprana edad puede afectar a la capacidad de memoria a mediana edad. 

Tienes problemas de tiroides

Tanto el hipotiroidismo, como el hipertiroidismo se han relacionado con afecciones a la función cognitiva. 

El primero de ellos, cuando la glándula tiroides no produce suficiente hormona tiroidea, da lugar a olvidos, confusión mental y podría provocar el encogimiento del hipocampo —un área del cerebro involucrada tanto a largo como a corto plazo en la memoria—, según un estudio.

Otra revisión de la literatura relacionada, publicada en Cureus Journal of Medical Science, encontró que el hipertiroidismo aumenta el riesgo de demencia en personas mayores. 

Tomas medicamentos que tienen efectos secundarios relacionados

La afección a la capacidad de memoria o de atención podría ser un efecto secundario de algunos medicamentos. Entre ellos, los anticolinérgicos, somníferos de venta libre, el Benadryl o las benzodiazepinas. 

Estos últimos, más conocidos como medicamentos contra la ansiedad, pueden "disminuir la actividad en partes clave del cerebro" y conducir a la pérdida de memoria a corto y largo plazo, según AARP.

No duermes bien

No dormir puede reducir el tamaño de tu cerebro, retrasar los tiempos de reacción, los niveles de glucosa, alterar los estados de ánimo, provocarte dolores de cabeza y desequilibrios hormonales, según destacan los investigadores en Neurology.

Además, durante las etapas más profundas del sueño, ciertas proteínas se eliminan del cerebro. De no completarse estos ciclos, se pueden acumular sustancias tóxicas en el cerebro, dice el Dr. Petersen a Prevention.

"Las personas con privación del sueño y trastornos del sueño no solo sufren problemas de memoria, sino también fatiga diurna, problemas de atención y reducción del tiempo de reacción", advierte a Health el director médico de New York Neurology and Sleep Medicine, Allen Towfigh.

Atribuyes todo el descanso al sueño

"Estamos acostumbrados a pensar: 'si no estoy haciendo, no estoy siendo'. Parece que nuestro valor está asociado a las cosas que hacemos, muchas cosas y muy interesantes", critica la terapeuta en una entrevista con Business Insider España.

"El descanso no tiene siempre que atribuirse al sueño, sino también al descanso mental. En este caso, es el no hacer. Debes tener momentos del día en el que no hagas nada y no te sientas mal con ello. Has de romper con la idea de tener que estar haciendo algo siempre", ejemplifica.

No haces ejercicio

Según Heidi Godman, editora de Harvard Health Letter, el ejercicio ayuda a la memoria y al pensamiento a través de medios directos e indirectos.

"Los beneficios del ejercicio provienen directamente de su capacidad para reducir la resistencia a la insulina, reducir la inflamación y estimular la liberación de factores de crecimiento, sustancias químicas en el cerebro que afectan la salud de las células cerebrales, el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos en el mismo e incluso la abundancia y supervivencia de las células cerebrales", dice.

Cuánto tiempo deberías hacer ejercicio según tus objetivos

Aunque Sánchez-Anegón recuerda que si un día estás cansado, no tienes por qué hacer ejercicio. 

"Parece que no podemos limitarnos a hacer un poco de ejercicio, o hacemos todo o no hacemos nada. Y esto es fruto del empuje a la perfección", advierte.

Estás en la premenopausia o pasando la menopausia

El deterioro cognitivo asociado a la premenopausia o a la menopausia es pequeño, pero significativo, de acuerdo con una investigación de PLoS One.

De acuerdo con la Dra. Faubion, se desconoce con exactitud por qué sucede esto. Pero enfermedades subyacentes o síntomas de este periodo como los cambios de humor, la ansiedad o la depresión podrían influir. 

Según un estudio de Neurology, las cosas vuelven a los niveles previos a la menopausia una vez que pasas por los altibajos de la transición.

Bebes demasiado alcohol

Los beneficios del alcohol, comparados con sus consecuencias negativas, son limitados. 

Según una investigación de la Universidad de Oxford y la University College de Londres, comparte BestLife, los que beben entre 15 y 20 bebidas alcohólicas a la semana, tienen 3 veces más probabilidades de sufrir atrofia del hipocampo. 

También ralentiza al sistema nervioso central y, como consecuencia, afecta a la memoria. E incluso se ha estudiado que beber grandes cantidades de alcohol durante un largo período de tiempo puede disminuir el volumen cerebral.

Tienes problemas auditivos

Estudios de la Universidad de Johns Hopkins y publicados en JAMA han encontrado asociaciones entre la pérdida auditiva y la demencia. 

El primero de ellos encontró que se relacionaban por todas las causas. Los segundos, con el deterioro de la función cognitiva. 

Estás trabajando mientras estás enfermo

Tu cuerpo está intentando luchar contra un malestar y tú le estás obligando a dar el 200%. Así no consigues ni una cosa ni la otra. 

Cuando estás enfermo, necesitas hacer reposo para recuperarte y dar realmente lo mejor de ti. De lo contrario, estarás siendo menos productivo y eficiente que incluso si te tomases un rato para descansar, porque el malestar podría durar más tiempo del deseado. 

No socializas lo suficiente

Socializar es la clave para evitar la aparición de la depresión, según la Escuela de Medicina de Harvard.

"De lejos, el más prominente de estos factores fue la frecuencia de confiar en los demás, pero también las visitas a familiares y amigos, lo que resalta el importante efecto protector de la conexión social y la cohesión social", explica el principal autor del estudio, el profesor de psiquiatría Jordon Smoller.