El CEO de Stellantis no contempla a España en sus planes para desplegar fábricas de baterías: "Por el momento, el Gobierno no se ha puesto en contacto con nosotros"

Carlos Tavares, CEO de Stellantis, durante el International Motor Show de Ginebra (Suiza).
Carlos Tavares, CEO de Stellantis, durante el International Motor Show de Ginebra (Suiza).

REUTERS/Arnd Wiegmann

  • Stellantis pretende abrir plantas de baterías en Francia, Alemania e Italia, pero no en España, ya que su gobierno "no se ha movido rápidamente" y tienen menor penetración del vehículo eléctrico, según su consejero delegado, Carlos Tavares.
  • El ejecutivo se ha mostrado esperanzado en que la crisis de semiconductores vaya mejorando a partir del verano, conforme se equilibren oferta y demanda.
  • Tavares ha considerado que el valor de Tesla en bolsa "no se basa en una realidad física", en una entrevista con cuatro medios europeos.
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Stellantis, el grupo automovilístico formado por la fusión entre la italoestadounidense Fiat Chrysler y la francesa PSA que es el cuarto fabricante mundial que tiene una destacada presencia en España con tres fábricas (Vigo, Zaragoza y Madrid) no tiene al país en sus planes de despliegue de fábricas de baterías.

Por el momento, el conglomerado tiene previsto abrir una megafactoría en Francia, otra en Alemania y está en conversaciones con el gobierno italiano para abrir una tercera, pero no alberga a España entre los destinos de estas plantas, según ha admitido el consejero delegado de la compañía, el portugués Carlos Tavares, en una entrevista telemática a cuatro medios de comunicación europeos (el francés Les Echos, el alemán Handelsblatt, el italiano Corriere della Sera y el español El Mundo).

Preguntado por si España podría tener una oportunidad de contar con una planta de baterías de Stellantis en su territorio, el directivo se ha mostrado escéptico. "Tal vez, pero España no es uno de los estados europeos que se han movido rápidamente. También podemos ver que la proporción de ventas de vehículos eléctricos en España es menor que en otros lugares", ha declarado a este grupo de periódicos.

Las ventas de eléctricos puros en los países europeos (incluyendo Noruega, Suiza, Islandia y Reino Unido) sobrepasaron por primera vez a las de diésel en diciembre de 2021, al alcanzar una cuota de mercado del 20%. Sin embargo, en España esa proporción es muy inferior, de apenas el 2,8% de las ventas totales.

La planta de Stellantis en Figueruelas, candidata a producir los eléctricos Lancia Ypsilon y Peugeot 208

En sus declaraciones, Tavares ha señalado que Stellantis está "muy abierto" a discutir su papel en España dentro de los fondos europeos —el Gobierno aprobó hace seis meses su primer PERTE, un mecanismo para distribuir más rápido los fondos europeos en sectores estratégicos, para el vehículo eléctrico—, pero ha advertido que hasta el momento no han tenido comunicación.

"Por el momento, el Ejecutivo no se ha puesto en contacto con nosotros, ni mucho menos", ha resaltado.

Stellantis ha sido este año, el primero completo tras la culminación de su fusión, como tercer fabricante de automóviles en Europa, con un total de 2,37 millones de unidades vendidas. No obstante, no ha podido evitar la tendencia de caídas del sector, con un 1,6% menos de entregas, una proporción mucho menor que el líder Volkswagen, que cayó un 3,7% respecto a 2020.

Tavares se ha mostrado crítico con los planes de descarbonización del automóvil de la Comisión Europea, que pasan por prohibir la venta de coches de combustión —gasolina, diésel e híbridos— a partir de 2035. "Tendremos que empezar a transformar todas las fábricas muy rápidamente (...) Sin una transición gradual, habrá importantes consecuencias sociales", ha alertado.

El ejecutivo portugués ha reclamado una reflexión sobre el papel de los híbridos, a los que considera más eficientes y asequibles y que dan "un beneficio inmediato" a la hora de reducir las emisiones, mientras los eléctricos puros los considera menos asequibles y que requieren subvenciones que "no son sostenibles.

El fin de la crisis de semiconductores, a partir del verano

La escasez global de semiconductores ha provocado un golpe durísimo al sector automovilístico, provocando retrasos en la producción de más de 6 meses y retrasando la recuperación tras la pandemia.

Tavares ha señalado que la crisis durará "como mínimo hasta finales de año", pero se ha mostrado confiado en que a partir del verano, el suministro y la demanda de chips comiencen a equilibrarse. "Las nuevas capacidades de producción equilibrarán la oferta y la demanda", ha señalado.

El ejecutivo se ha quejado por los costes energéticos que están soportando en países europeos en los que están presentes, como Italia, pero a nivel general se ha reafirmado en que pretenden no cerrar fábricas.

"Cerrar significa poner un candado en la puerta y enviar a todos a casa. No lo hicimos. Y si puedo evitarlo, lo evitaré. Suelo cumplir mis promesas, pero también tenemos que seguir siendo competitivos. El futuro de nuestros centros dependerá de las limitaciones políticas de la descarbonización en Europa y de sus consecuencias en el mercado del automóvil", ha explicado. 

Críticas a Tesla: "Su valor bursátil no se basa en una realidad física"

El primer ejecutivo de Stellantis se ha mostrado muy crítico con Tesla, el fabricante estadounidense de automóviles eléctricos dirigido por Elon Musk y cuyo crecimiento en bolsa le ha llegado a superar el billón de dólares de capitalización. Actualmente, vale 1,03 billones de dólares.

Este hito ha puesto a Tesla en una diferencia espectacular, hasta el punto de valer más que Ferrari, BMW, Hyundai, Volkswagen, GM, Ford, Daimler, Toyota, Hyundai, Renault, Honda, Volvo, Nissan, Kia, Mazda, Subaru, Suzuki, Mitsubishi, Aston Martin y Harley-Davidson juntas.

Elon Musk explica cómo los robotaxis autónomos de Tesla acabarán justificando la estratosférica capitalización bursátil de la compañía

Tavares ha asegurado que siente "un enorme respeto por el extraordinario trabajo" de Musk. "Pero está claro que su valor bursátil no se basa en una realidad física", ha apostillado. Bajo su punto de vista Tesla "no tiene el problema del legado que tienen todas las empresas automovilísticas" estadounidenses y europeas, ni tampoco "limitaciones políticas y sociales" que ellas sí tienen.

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