Consejos médicos para que no se te hinche la tripa

El exceso de gases tiende a ser la principal causa de tu abdomen hinchado. Si tienes el estómago hinchado después de comer, podría ser tan simple como comer demasiado y muy rápido. Podría deberse asimismo a una intolerancia alimentaria, —como  la celiaquía o la intolerancia a la lactosa— u otra afección que provoque la acumulación de gases como  alteración de la microbiota intestinal.

Si tienes problemas para ir al baño es normal que tu estómago se note más distendido.

A veces, un estómago hinchado puede indicar una afección médica más grave. La hinchazón persistente es uno de los síntomas del cáncer, por lo que si dura más de 2 semanas y va acompañado de síntomas como dificultad para comer, cansancio o sangre en las heces es adecuado una consulta con el médico.

Cómo prevenir la hinchazón abdominal

Cambiar ciertos hábitos "es fundamental para el correcto tratamiento de la distensión abdominal", aconseja Susana Jiménez Contreras especialista de la Fundación Española del Aparato Digestivo en Cuídate Plus.

Por ello los especialistas animan a reducir los alimentos que pueden producir gases. Esto conlleva menor consumo de alimentos saludables como legumbres,crucíferas o cereales integrales,  conviene hacerlo bajo consejo médico.

Para evitar una tripa hinchada ayudará limitar la ingesta de refrescos y otras bebidas con gas. También mascar chicle o comer demasiado deprisa, recomienda la Biblioteca Medica de EEUU.

El ejercicio estimula los intestinos por lo que es conveniente cuando se tienen problemas de estreñimiento. Ayudará además tomar suficiente agua y fibra. Este nutriente beneficia la flora intestinal, por lo que será beneficioso frente a alteraciones de la micriobiota, según la Cleveland Clinic.

"La fibra provocará más gases al principio, pero una vez que comience a circular por el sistema digestivo, ayudará a limpiar la materia fecal fermentada que está acumulada allí. La fibra también le dice a tu cuerpo que beba más agua y lo hace sentir lleno antes para que no comas demasiado", apunta la reputada clínica.

Los alimentos procesados

son bajos en fibra y altos en sal y grasas.  Lo que provoca retención de agua y ralentiza el proceso digestivo. Todas estas cosas pueden provocar estreñimiento e hinchazón, por lo que puede venirte bien no abusar de ellos.