El Gobierno propondrá a la UE un fondo de 1,5 billones de euros para los países afectados por el coronavirus financiado con deuda perpetua

• El Gobierno español propondrá a los líderes de la Unión Europea este próximo jueves crear un fondo de recuperación de 1,5 billones de euros para ayudar a los países afectados por el coronavirus, según adelanta El País.
• La propuesta implica que el fondo esté vinculado al presupuesto de la UE, que se financie a través de deuda perpetua y que se reparta a través de transferencias a fondo perdido y limitadas a la duración de la crisis.
• Esta medida buscaría evitar el endeudamiento de los países comunitarios más afectados por la pandemia y sufragar el coste de los intereses de la deuda perpetua a través de impuestos de ámbito europeo, como los que regulan las emisiones de CO2.
• Además, la propuesta española pide avanzar hacia una armonización fiscal para evitar fugas de ingresos a países comunitarios con regímenes fiscales más laxos, como el de Países Bajos, país que ha rechazado, junto a Alemania o Finlandia, que se mutualice la deuda que genere el coronavirus en la UE.
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Este próximo jueves, los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) celebrarán una reunión a través de videoconferencia para intentar acordar un plan europeo de recuperación de la crisis del coronavirus. Tras varias reuniones a principios de mes en las que se hizo patente la división en el seno de los 27 sobre la respuesta económica a la pandemia, este nuevo encuentro busca ampliar los acuerdos a los que se llegaron las pasadas semanas.

En concreto, el pasado día 9 el Eurogrupo acordó movilizar más de medio billón de euros en préstamos para ayudar a países, empresas y trabajadores afectados por el coronavirus, que se concretaba en 3 partidas a corto plazo: una línea de crédito de 240.000 millones de euros del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), 200.000 millones en créditos para empresas del Banco Europeo de Inversiones y un fondo común contra el paro dotado con 100.000 millones.

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Sin embargo, en ese encuentro no se consiguió ningún avance respecto a la mutualización de la deuda europea derivada de la pandemia, los conocidos como coronabonos, que defendían Italia, España y Francia ante el rechazo frontal de Países Bajos, Alemania o Finlandia. Este jueves, el Gobierno español intentará superar el bloqueo holandés con una propuesta que, sin recurrir a los coronabonos, propone sufragar las pérdidas con deuda perpetua, según adelantaEl País.

La propuesta de Plan Marshall contra el coronavirus que maneja el Ejecutivo que preside Pedro Sánchez implica la creación de un fondo de recuperación de 1,5 billones de euros para ayudar a los países afectados por el coronavirus. Esa cifra coincide con las previsiones del Banco Central Europeo (BCE), que calculó la principios de abril que la UE y los 27 deberían gastar 1,5 billones en ayudas para paliar los efectos de la pandemia.

Sin embargo, el plan español detalla que el fondo de recuperación estaría vinculado al presupuesto de la UE, se financiaría a través de deuda perpetua, de la que El País recuerda que solo hay que pagar por sus intereses y que su coste se asumiría de forma solidaria entre los 27. Para hacer frente a esos intereses, el Gobierno propone recurrir a impuestos de ámbito europeo, como los que regulan las emisiones de CO2.

El reparto de las ayudas de este fondo se realizaría a través de transferencias a fondo perdido y limitadas a la duración de la crisis para los países afectados por la pandemia. De este modo, esta medida buscaría evitar el endeudamiento de los países comunitarios que más han sufrido el coronavirus y que ya ha generado advertencias de expertos respecto a que podría provocar una nueva crisis de deuda en la eurozona que derive en un default de Grecia o Italia.

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El periódico del Grupo Prisa asegura que la propuesta española de un fondo de recuperación busca facilitar un consenso con Alemania, ya que se evita insistir en la puesta en marcha de coronabonos a través de aceptar una medida que se ciñe al marco del presupuesto comunitario y que no implica cambios legales.

Sin embargo, el plan español ajusta cuentas con Países Bajos, cuyo Gobierno no ha escatimado descalificaciones a los socios europeos del sur para intentar frenar su propuesta de implantar los coronabonos. Así, la propuesta del Gobierno pide avanzar hacia una armonización fiscal de la UE para evitar fugas de ingresos tributarios a otros países comunitarios con regímenes fiscales más laxos, como es el caso de Países Bajos, país en el que tributan muchas grandes empresas por este motivo.