Cuánto dinero deberías tener antes de contratar a un asesor financiero independiente, según un profesional con más de 25 años de experiencia

En el imaginario colectivo, los asesores financieros son profesionales que sólo trabajan con grandes fortunas, con personas que tienen mucho dinero. Además de capital, esto implica tener unos conocimientos mínimos sobre finanzas personales y experiencia en el mundo de la inversión —excepto si son herederos, han ganado la lotería o recibido un gran premio—. 

Y en cierto modo, no están muy lejos de la realidad. 

Los asesores financieros se adaptan al perfil de sus clientes, según su poderío financiero (valor neto), sus objetivos y aspiraciones. Luego, tienen en cuenta otros factores como la aversión al riesgo, el tiempo que pretenden estar invertidos y su edad. Ahora bien, este nivel de detalle tiene un precio. 

Hoy en día, hay empresas de asesoramiento que sólo cobran por el éxito de las inversiones de sus clientes, como MiCappital. Esto no incluye una sesión en exclusiva con un asesor financiero para analizar cada uno de tus movimientos. En su lugar, se hace un seguimiento con un "asesor digital" (un tipo de chatbot diseñado para resolver las dudas más frecuentes). 

Los criterios de inversión se adaptan a tu perfil a través de tests que has de responder con total sinceridad —de lo contrario, podría costarte muy cara cualquier recomendación— y que requieren tener unos conocimientos mínimos sobre tu perfil de riesgo. También tiene en cuenta los bancos en los que tienes tu dinero —a través de los cuales empezarías a invertir— y tus objetivos.

Una sesión por videollamada con un asesor financiero ya supondría un coste adicional.

Los bancos también pueden poner a tu disposición asesores que te ayuden a gestionar tu patrimonio, pero ninguno de ellos es independiente. Aunque se adapten a tus posibilidades, su interés está condicionado por el de la propia entidad. Las comisiones suelen ser más altas y, en consecuencia, las rentabilidades son más modestas o los beneficios que obtienes son más pequeños. 

Si ninguna de estas opciones te convencen y lo que buscas es un asesor financiero independiente, que te haga un análisis detallado, siga cada uno de tus movimientos y vele única y exclusivamente por tus intereses, siento decirte que necesitas tener un capital inicial importante para que te sea realmente rentable. 

"El único filtro es el sentido común. Si tu vas a pagar 200 euros al año en el servicio básico o más de 400 por un servicio premium, te tiene que ser rentable", explica Víctor Alvargonzález, socio fundador de Nextep, una firma de asesoramiento financiero independiente. 

En otras palabras, pagarle a un asesor 200 euros al año por un plan básico, cuando vas a invertir unos 5.000 euros al año, podría hacer desaparecer tus beneficios de todo el periodo.  

"El asesoramiento se puede dividir, como los asientos de un avión. En nuestro caso, entre básico, premium y presencial. Pero incluso en el básico, creemos que tienes que tener por lo menos 20.000 o 30.000 euros para invertir, para que pagar 200 o 500 euros al año te merezca la pena", recomienda el experto que tiene más de 25 años de experiencia en el sector. 

Ahora bien, si ya dominas esos conocimientos básicos sobre las finanzas personales y tienes experiencia invirtiendo con un banco comercial, el ahorro en comisiones y un aumento de las rentabilidades podría costear el valor de un asesor financiero independiente.

En lo que ahorras tus primeros 20.000 euros para contratar a un asesor financiero independiente, puedes perfeccionar tu hábito del ahorro, diseñar tu estrategia de inversión, construir un fondo de emergencia —imprescindible para empezar a invertir— e incluir las inversiones en tu presupuesto personal. 

También puedes recurrir a un planificador financiero si no sabes por dónde empezar para cuidar tus finanzas personales, contratar servicios de asesoramiento más básicos, que sean gratuito o muy, muy baratos, pero que te ayuden a enfocar tus primeras inversiones.