Como a Zuckerberg, a Pallete le molesta llegar tarde: qué puedes esperar de Telefónica Tech en el nuevo plan estratégico de la teleco española

Telefónica celebra el miércoles 8 de noviembre un Investor Day —el primero en 12 años— en el que presentará su nuevo plan estratégico. La compañía llega a al encuentro con el mercado de las telecos patas arriba: se espera que la Comisión Europea autorice la fusión entre Orange y MásMóvil antes de que acabe el año y Zegona se hará con el control total de Vodafone España en unos meses.

Todo ello, sin mentar el principal pulpo del garaje: la irrupción de Saudi Telecom en el accionariado de Telefónica, a la espera de que el Ministerio de Defensa autorice la operación —debido al vigor del escudo antiopas que se consolidó mediante real decreto este mismo año— y la posibilidad de que la SEPI entre también en la multinacional española para tratar de equilibrar la balanza.

El plan estratégico que José María Álvarez-Pallete desvelará en los próximos días llega 4 años después de otro que ya transformó la firma para siempre en 2019. 

Fruto de aquel plan, la teleco focalizó su inversión en sus cuatro mercados más importantes, España, Brasil, Alemania y Reino Unido; creó una filial para sus infraestructuras, Telefónica Infra, y otra para todo su negocio digital —cloud, ciberseguridad, internet de las cosas e inteligencia artificial—, Telefónica Tech.

Si Telefónica ya se consideraba una empresa crítica por ser una gran multinacional española de un sector elemental para el país —las telecomunicaciones—, el hecho de que también dirijan un creciente negocio en ciberseguridad y nuevas tecnologías lo complica todo un poco más.

Mucho se está hablando de lo que puede deparar el nuevo plan estratégico de la compañía para su filiales. En junio, antes de confirmar que el 8 de noviembre presentará un nuevo plan estratégico, la compañía confirmó la fusión de otras de sus filiales, Telefónica I+D y Telefónica Digital, en una nueva sociedad bautizada como Telefónica Innovación Digital que liderará Chema Alonso.

En cuanto a su filial Telefónica Tech, creada al albur del plan de 2019, su valor rondaría los 2.000 millones de euros. A principios de octubre Bloomberg adelantó los planes de que entre en su accionariado un gran socio inversor. Telefónica Tech facturó 465 millones en el último trimestre fiscal, un crecimiento interanual del 36,1%.

Telefónica Tech cuenta con dos unidades de negocio. Por un lado, Telefónica IoT & Big Data Tech, la filial especializada en su negocio de dispositivos conectados. Por el otro, Telefónica Cybersecurity & Cloud Tech, donde estaría la mayor parte de su valor: el grupo lo cifró en 1.673 millones de euros a finales del año pasado. Este verano, la compañía anunció la fusión de ambas divisiones.

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En la primera mitad de 2023, ambas unidades superaron "el crecimiento del mercado", logrando que su negocio aumentase a doble dígito: un 67% en el caso de la unidad IoT y Big Data y un 36,5% en el caso de la unidad de ciberseguridad y nube.

Telefónica Tech se ha consolidado en la industria de la ciberseguridad en apenas 4 años gracias, en buena parte, a las operaciones corporativas que ha ido anunciando en los últimos años. En 2021 se hizo por 392 millones con la británica Cancom, que convirtió en Telefónica Tech UK & Ireland, y el año pasado con la alemana BE-Terna, por 344 millones o con Incremental, por 209 millones.

Álvarez-Pallete, cuando presentó el plan estratégico de 2019, consideró que Telefónica estaba lista para sus siguientes 100 años. Contaba con una filial de infraestructura pero también con una filial enfocada en las tecnologías que marcarán —y están marcando ya— los negocios y las vidas en línea: nube, ciberseguridad, IoT.

Pero en 2019 ni Telefónica ni McKinsey, la consultora que diseñó el plan —y ha trabajado en el que la multinacional española presentará en las próximas horas— habían oído hablar de coronavirus, pandemia, ni tampoco de metaversos. 

Así, no es de extrañar que el propio Pallete, después de que se disparase el hype en torno a la propuesta de Meta, advirtiera contrariado de sus desafíos regulatorios. "Si dejamos que cada gran tecnológica cree su metaverso, cada una será su propio país", dijo, con gravedad, apenas semanas después de que Facebook cambiara de marca a Meta.

Hoy el hype no es sinónimo exacto de metaverso. Lo es de tecnologías como las IA generativas y desinformación donde Telefónica Cybersecurity & Cloud Tech todavía tiene mucho que demostrar.

Su expertise en el campo de la ciberseguridad es amplio, pero mientras el foco del grupo se adentra en la softwarización de las redes —Pallete presentó el OpenGateway en el Mobile World Congress—, a nivel tecnológico las soluciones de Telefónica Tech pueden dar más de sí. Y eso es lo que la multinacional espera hacer valer con la búsqueda de socios relevantes para la filial.

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Hasta el año pasado se elucubraba con la idea de que Telefónica Tech acabara volando libre saltando al parqué. La posibilidad de que la filial tecnológica acabara aceptando la llegada de inversores que ocuparan hasta el 49% de su capital excluyó esa posibilidad ya en 2020, cuando se leyeron titulares sobre la búsqueda de un socio financiero para Telefónica Tech.

Se esperaba que una operación de ese calibre se hubiera producido en la segunda mitad del 2021: Cinco Días advirtió en julio de ese año que la multinacional se había hecho con los servicios de Morgan Stanley y KPMG para que liderasen aquel proceso. Finalmente se ha tenido que esperar hasta ahora para que una operación como esta se reactivase.

No está claro si en el Investor Day de este miércoles se abundará en detalles sobre esta operación, si se conocerán postulantes o si es que se produce. Lo que está claro es que si Telefónica estaba en 2019 lista para sus siguientes 100 años, realmente lo ha estado para sentar las bases durante estos 4 ejercicios.

De la misma forma que a Mark Zuckerberg no le hizo gracia que Facebook llegara tarde a la fiebre de los dispositivos móviles, a Pallete tampoco le hizo gracia que Telefónica no inventara WhatsApp. Así se puede entender que el plan estratégico vigente solo haya durado 4 años antes de ser reemplazado.

A la vorágine en la que se sumerge la industria tecnológica hay que añadir que el negocio de Telefónica Tech va desde conectar contadores de agua para la empresa de abastecimiento de varias localidades sevillanas a instalar sistemas de ciberseguridad en submarinos junto con Navantia, con lo que se puede entender el revuelo que supone la entrada de los saudíes de Stc en el grupo.

Precisamente por esta razón, de igual modo que la filial tecnológica de la teleco ha logrado situarse como un baluarte para Pallete durante los últimos trimestres en los que la multinacional española se ha centrado en el saneamiento de sus cuentas, cabe esperar que la estrategia del grupo sea convertir a la firma en punta de lanza tecnológica.

Esto lleva a que la teleco, a nivel grupo, saque pecho de sus capacidades a la hora de imaginar, desarrollar y desplegar las redes del futuro, softwarizadas, preparadas para el Web3 que Chema Alonso divulga con ahínco en todos los foros en los que tiene la ocasión de participar.

Y también lleva a la filial, a Telefónica Tech, a impulsar sus capacidades en materia de inteligencia artificial y ciberseguridad aprovechando el ecosistema regulatorio que la Unión Europea levanta sobre esta tecnología.

Si el propio Pallete ya advertía en 2021 sobre la necesidad de regular los metaversos, no es difícil encontrar declaraciones de directivos de la multinacional reivindicando la necesidad de hacer lo propio con la IA y cíber. La gerente en Políticas Públicas Digitales de la compañía, Nuria Talayero, recopilaba las nuevas regulaciones en ciberseguridad en un reciente artículo del blog corporativo.

Este mismo verano el propio Alonso coincidió en un evento organizado por la Cámara de Comercio de EEUU y la agencia de noticias Europa Press. En él, el mediático hacker reivindicó la necesidad de meter en cintura esta tecnología, que tiene "muchísimos riesgos".

Es en estas circunstancias donde Telefónica seguirá protagonizando insólitas alianzas. La compañía es una de las firmas que con más ahínco defiende el fair share o la retribución justa que Bruselas se ha abierto este año a estudiar: que las tecnológicas aporten para el despliegue de redes. 

Eso no ha impedido que Telefónica haya potenciado en los últimos años relaciones simbióticas con grandes tecnológicas. Simbióticas porque han sido fructíferas para ambas partes, como corroboraba en una entrevista con este medio meses atrás el propio director general de Amazon Web Services para Iberia, Miguel Álava.

Tanto desde el punto de vista de la softwarización de redes —AWS y Telefónica probaron una de las API del OpenGateway que anunció la GSMA en el Mobile World Congress de Barcelona de este año— como desde el punto de vista del partnership con la filial tecnológica de la teleco. Para Álava, Telefónica Tech es un patnership importante:

"Logramos una capilaridad de mercado que muy pocas empresas tienen en nuestro país. Al final, la vocación nuestra no es ir al mercado a cada una de las pequeñas y medianas empresas, porque no escalamos. El añadir valor a través de nuestros partners es nuestra vocación y Telefónica lo está haciendo", abundó el directivo de AWS.

Ahora toca esperar qué se concreta en el nuevo plan estratégico de Telefónica, si llega un nuevo inversor, de qué parte del mundo, y qué planes tiene Pallete para Telefónica Tech: la aspiración tecnológica que aspira a ser el as en la manga de la teleco.