Los jets privados de Elon Musk han volado 441 veces este año

No tiene que ser fácil dirigir seis empresas a la vez, pero tener tu propia flota de jets privados tiene que ayudar bastante.

Desde que se hizo cargo de Twitter —la red social que ahora se conoce como X— a finales del año pasado, Elon Musk ha estado repartiendo su tiempo entre Texas y California (Estados Unidos), dejando así de dormir en la fábrica de Tesla para empezar a hacerlo en las oficinas de Twitter. Si alguien necesita pruebas, puede echar mano del kilometraje de sus jets privados.

A fecha de 14 de diciembre, los aviones privados de Musk, valorados en más de 100 millones de dólares (unos 92 millones de euros), han surcado los cielos 441 veces este año, de acuerdo con los datos recopilados por la página web de rastreo de aeronaves JetSpy.

Según este portal de rastreo, el multimillonario empresario posee actualmente dos jets privados Gulfstream: un G650ER, con matrícula N628TS, y un G550, con matrícula N272BG.

Además, un segundo G550, con el número de cola N502SX, fue matriculado a nombre de SpaceX en septiembre de 2021. Este avión habría volado unas 630 horas a lo largo de 246 vuelos, según JetSpy, y podría ser utilizado para viajes que realiza el personal de la compañía de exploración espacial.

A efectos de este artículo, este segundo G550 no se ha incluido en el total de vuelos realizados por Musk porque dicho avión no está registrado a su nombre.

Además de los dos aviones privados con los que cuenta en la actualidad, el CEO de Tesla ha encargado el Gulfstream G700, lanzado recientemente, y en su día también tuvo un Dassault Falcon 900B.

El G650ER que Musk adquirió en el año 2016 es el avión de mayor autonomía de la colección y le permite volar cerca de 14.000 kilómetros sin tener que realizar escalas para repostar. Los jets más grandes de Gulfstream, como el de Musk, suelen disponer incluso de un dormitorio.

A lo largo del 2023, los aviones del multimillonario han permanecido en el aire más de 1.161 horas, lo que equivale a más de 48 días volando, según datos de JetSpy. 

Este portal de rastreo de aeronaves agrega su información de vuelo utilizando datos ADS-B, que se transmiten desde varios proveedores y redes. ADS-B es una tecnología de vigilancia pública estadounidense, que transmite información como la ubicación GPS y la altitud de un avión con respecto a otro o con respecto a estaciones terrestres. 

Esta tecnología saltó a los titulares el año pasado, cuando el estudiante universitario Jack Sweeney la utilizó para difundir los datos de vuelo de Musk en redes sociales.

Elon Musk, creador de grandes negocios como Tesla y SpaceX, es la persona más rica del mundo: así vive y gasta su dinero

Desde entonces, el empresario ha intentado ocultar la información de sus vuelos mediante un programa creado por la Administración Federal de Aviación estadounidense, pero no ha logrado tener éxito. Los entusiastas de los vuelos han seguido rastreando los viajes de Musk mediante la red ADS-B.

Todavía no hay forma de conocer los pasajeros de los jets de ninguno de los vuelos que realiza el dueño de X (Twitter). Aunque en varias ocasiones se ha visto a Musk subir a sus diferentes aviones y los patrones de vuelo de las aeronaves han coincidido a veces con las visitas públicas de Musk a eventos como un lanzamiento de SpaceX o reuniones con funcionarios extranjeros.

Musk no ha respondido a la petición de declaraciones enviada por Business Insider.

Viajes de 13 horas y vuelos de 5 minutos

En 2023, el vuelo medio de los dos aviones del director ejecutivo de SpaceX ha sido de algo más de dos horas y media, un trayecto similar al tiempo que tarda un avión en volar desde Hawthorne, California (donde tiene su sede SpaceX), hasta Brownsville, Texas (lugar de lanzamiento de SpaceX y estado al que Musk trasladó la sede de Tesla).

Los destinos más populares del G650 de Musk son Austin, Texas, y los aeropuertos de Oakland y San José, California. Este avión privado ha realizado 166 vuelos este año.

Por su parte, el Gulfstream G550 de Musk, con número de matrícula N2727BG, ha realizado 275 vuelos hasta el 14 de diciembre, según JetSpy. La aeronave visita con frecuencia los aeropuertos de Hawthorne y Los Ángeles (California), así como el aeropuerto internacional de Brownsville South Padre Island (Texas), cerca de la plataforma de lanzamiento de los cohetes de SpaceX.

Sweeney, el estudiante universitario que se ha dedicado a rastrear los jets privados de Musk, ha afirmado en el pasado que los patrones de vuelo habituales del multimillonario pueden ser un indicio inequívoco para identificar sus aviones, aunque él haya intentado ocultar los datos de sus propios vuelos.

El vuelo más largo que realizó uno de los jets privados de Musk en 2023 fue un trayecto de casi 13 horas realizado en el mes de agosto a Tokio, Japón. Musk, su —a veces— novia Grimes y su hijo de tres años X fueron vistos en Tokio en ese momento.

Los aviones del multimillonario también han efectuado otros vuelos internacionales. Recientemente, el avión de Musk voló hasta Israel, cuando el empresario se reunió con líderes extranjeros y visitó un kibutz que fue atacado por Hamás.

El vuelo más corto realizado por una aeronave de Musk en 2023 fue de cinco minutos y los datos muestran que el jet permaneció en el aeropuerto de Long Beach. Es probable que el trayecto en cuestión se debiese al reposicionamiento del avión por parte del piloto.

Los aviones de Musk también realizaron vuelos de entre 11 y 15 minutos entre los aeropuertos de Hawthorne y Los Ángeles en primavera, unas localizaciones situadas a menos de 16 kilómetros de distancia.

Aunque los jets privados sean prácticos para el ajetreado estilo de vida de Musk, tienen un alto precio. Los aviones del multimillonario emitieron unas 5.159 toneladas métricas de CO2 el año pasado, según JetSpy. En cambio, una persona normal en Estados Unidos —país de residencia de Musk— produce unas 16 toneladas de dióxido de carbono, según la University Corporation for Atmospheric Research.

Además, los jets privados del empresario consumieron más de dos millones de litros de combustible en 2023, lo que significa que costó cerca de 3 millones de euros abastecerlos este año, según los datos de JetSpy.

En general, los aviones de Musk parecen haber volado menos este año que el anterior. En 2022, sus jets surcaron los cielos 739 veces, registrando un total de 1.865 horas de vuelo.