Los despidos están a la orden del día y la inteligencia artificial que puede seleccionar personal como candidatos para dejar la empresa también. 

Mientras que la ola de despidos se cierne sobre todo los sectores y llega a España, el 98% de los responsables de recursos humanos admiten que los algoritmos y la IA les ayudará a tomar decisiones sobre despidos este año. 

En una encuesta realizada a 300 personas de los departamentos de RRHH de empresas estadounidenses y llevada a cabo por Capterra, una página web que revisa el software de estas herramientas, casi todos los entrevistados afirman que la inteligencia artificial les facilitará el trabajo en el futuro, especialmente para los despidos masivos. 

La IA ya se utilizaba para detectar a los mejores perfiles. Desde 2008, los responsables de contratación de personal han recurrido a programas de aprendizaje automático para analizar los millones de datos de los posibles candidatos, seleccionarlos para las entrevistas y para elegir a quien contratar o a quien ascender. 

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Ahora, los datos también pueden ser analizados por la inteligencia artificial para señalar quienes son los que deben de abandonar la empresa. 

De la contratación a los despidos

Ante las restructuraciones de gasto de las empresas para hacer frente a la crisis económica, los trabajadores son los primeros afectados.

Las big tech han sido las primeras en dar el paso de reducir su plantilla y llevar a cabo despidos masivos: Amazon despedía a 18.000 trabajadores, Google lo hacía de 12.000 personas, Meta eliminó 11.000 puestos y Microsoft recortaba a 10.000 empleados. Pero a ellas también se han sumado compañías como Glovo o Ford. 

Muchos de los trabajadores afectados por los layoffs ven sin sentido las decisiones tomadas por sus equipos directivos. Para ellos, algunos de los despidos eran completamente equívocos y perjudiciales para el propio funcionamiento de la empresa. 

Teniendo en cuenta que la IA se ha utilizado para contratar, es plausible pensar que los algoritmos también pueden estar detrás de los despidos, aunque esto no ha sido confirmado por ninguna empresa.

Recurrir al análisis de los datos por parte de las herramientas de aprendizaje automático puede suponer un alivio para los que tienen que tomar la delicada decisión de a quien despedir. Según la encuesta, el 70% de los directores de recursos humanos que participaron en la encuesta afirmaron que el factor más importante a la hora de despedir era el rendimiento. 

Los peligros de confiar solo en la IA para tomar la decisión

La automatización del trabajo permite recoger miles de datos de los empleados y estos pueden ser utilizados para medir su rendimiento. Mientras que puede parecer un barómetro objetivo para tomar decisiones de esta magnitud, los expertos señalan que confiar los despidos únicamente a la IA puede plantear problemas. 

El uso de la IA exige transparencia sobre cómo se recopilan los datos y qué orientación tiene el algoritmo para decidir qué personas son despedidas. No saber qué parámetros está teniendo en cuenta la inteligencia artificial o cómo se han tratado los datos puede conducir a malas decisiones. 

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Además, existen también riesgos de discriminación que preocupan a los expertos. Dejar en manos de la IA la decisión última de quién se queda o quien se va cuando una empresa decide que tiene que hacer rectores de personal, puede suponer un "riesgo de fuga" del talento de la empresa. 

Al igual que para contratar es necesario prestar atención no solo a habilidades técnicas, sino a actitudes y soft skills, a la hora de despedir, estos mismos factores deben tenerse en cuenta. El problema de la IA es que no es capaz de medir por sí misma estas capacidades. 

Aunque el uso de herramientas de IA pueda ser un alivio efectivo para el departamento de RRHH, está en manos de los responsables de personal evaluar las recomendaciones y tener en cuenta otros factores más humanos que no son cuantificables por la inteligencia artificial.