Elon Musk es un provocador nato, sin embargo, los consejeros delegados de las empresas contra las que arremete deben guardar silencio para evitar polémicas.
La cantante canadiense Grimes se ha mudado, ha predicado sobre la IA y ha levitado sobre un escenario. Ah, y ha entrado en guerra con el hombre más rico del mundo.
Parecía que el modelo de innovación de Silicon Valley estaba agotándose cuando la nueva carrera por la IA generativa ha hecho que la industria tecnológica se agite.
La implosión del sumergible Titán, un batiscafo experimental operado por OceanGate, fue el resultado de la arrogancia de su creador. Es una advertencia para 2024.
Ya se trate de Elon Musk y Mark Zuckerberg o de los padrinos de la IA tirándose dardos, parece que los magnates tecnológicos han estado guerreros este año.
La IA ya no es solo una palabra de moda en Silicon Valley: ya ha empezado a inundarlo todo, desde el mundo de las startups a los informes de previsiones económicas.
El duelo entre Musk y Zuck ha sido uno de los más sonados del año. Mark Zuckerberg va en cabeza por ahora, lo que hubiera sido impensable hace tan solo unos años.
Según varios extrabajadores, la cultura interna de Google ha cambiado para siempre este año, marchado por sus prisas en la carrera por la supremacía de la IA.
Es duro ser CEO. Vlad Tenev, de Robinhood, duerme una media de cuatro horas por noche. Tim Cook, máximo responsable de Apple, se levanta a las 5 de la mañana.
Las grandes tecnológicas están pasando de ser intermediarias a creadoras de contenidos con el uso de la IA generativa. Esto conlleva nuevas responsabilidades.
OpenAI ha publicado este lunes su nuevo protocolo de seguridad y la nueva junta directiva va a poder vetar las decisiones tomadas por su CEO, Sam Altman.
El mantra de Sam Altman habla de la importancia de moverse rápido, como hizo Mark Zuckerberg, pero su adaptación al ecosistema de la IA encierra graves peligros.
Una filtración muestra al CEO de Google asegurando que podría haber gestionado mejor los despidos, pero que, si no hubiese actuado, "habría sido peor".
El CEO y presidente de HP, el español Enrique Lores, comparte su rutina diaria, que incluye tiempo para pensar y un breve chapuzón a las cinco de la mañana.
Existe un grupo de WhatsApp secreto en el que participan más de 100 CEO de Silicon Valley y ni siquiera ellos sabían cuál fue el motivo del despedido de Sam Altman.
El despido de Sam Altman de OpenAI, y el papel que desempeñó Microsoft en su regreso, han revelado el poder que el gigante del software ejerce sobre la startup.
El cofundador de OpenAI fue una parte integral del auge de ChatGPT. Fuentes internas dicen que su papel en la destitución de Sam Altman lo ha cambiado todo.
Últimamente se habla mucho de la calidad de las búsquedas en internet. Gran parte del problema son los anuncios, pero hay una forma sencilla de solucionarlo.