Cómo van a ser las navidades de 2020: medidas que tendrás que seguir por la pandemia de coronavirus

A nadie se le escapa que las navidades de este año van a ser diferentes. La pandemia de coronavirus ha cambiado las relaciones personales, las dinámicas de trabajo, la forma en la que se disfruta del ocio y tantas otras situaciones que hasta el pasado mes de marzo se asumían como cotidianas.

Además, la situación en cuanto nuevos contagios y hospitalizaciones se ha recrudecido durante las últimas semanas, después de una pequeña tregua en verano, lo que ha dado lugar a confinamientos perimetrales y restricciones en cualquier actividad que implique contacto social, incluso se empieza a sopesar un toque de queda.

Si se llega al mes de diciembre con estos datos epidemiológicos parece seguro que las limitaciones no se van a relajar, si es que directamente no se vuelven más duras. Esto afectaría directamente a las navidades, una época en la que las reuniones sociales se multiplican, es decir, el foco perfecto para que el coronavirus galope a sus anchas.

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Una de las primeras voces autorizadas en señalar el potencial peligro de estas fiestas fue la Consejera de Salud de Cataluña, Alba Vergés, que el pasado mes de septiembre advirtió que las reuniones en casa no podrían ser de más de 6 personas y que no se celebrarán cabalgatas de Reyes, al menos en su formato tradicional.

"Deberemos hacer un ejercicio, todos y todas, para ver cómo nos vemos, como nos espaciamos", explicó la consejera.

Hasta el momento no se ha producido ninguna comunicación oficial sobre las medidas a seguir durante las navidades, pero a estas alturas parece lógico que serán muy parecidas o un poco más restrictivas que las actuales.

A continuación, se detalla cómo será la Navidad de 2020 en los ámbitos que más peso tienen en dichas fiestas: las reuniones familiares, la hostelería y el comercio.

Reuniones familiares

Resulta complicado pensar en una Navidad sin reuniones familiares. A no ser que la situación empeore más de lo esperado estas celebraciones estarán permitidas, pero con restricciones.

Si la normativa sigue hasta ahora no se permitirán reuniones de más de 5, 6 o 10 personas, dependiendo de la comunidad autónoma, por lo que las cenas y comidas en domicilios van a ser más solitarias que de costumbre. El objetivo es evitar a toda costa un crecimiento exponencial de contagios.

"Cuanto más personas se junten en una reunión, más posibilidades de que una de ellas esté infectada y pueda contagiar. Esto sucede especialmente en espacios cerrados y cuando haya proximidad física entre personas", explica a Business Insider España el Doctor especializado en enfermedades infecciosas Manuel Serrano Martínez, Jefe del Servicio de Medicina Interna del Hospital La Luz del Grupo Quirónsalud en Madrid, y miembro del equipo de la plataforma de telemedicina Top Doctors.

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"Si a ello añadimos que las familias son extensas por lo general, y que acuden a la casa de los padres, ya mayores, a los riesgos de contagio se añade la posibilidad de que la enfermedad, de producirse, sea más grave", matiza Serrano Martínez.

Este experto también ofrece algunos consejos que se deben tener en cuenta durante las reuniones entre familiares y amigos. Por ejemplo, el uso de mascarillas y evitar las efusiones de cariño al encontrarse. "Debe imperar la prudencia y evitar que las respiraciones estén en contacto, porque son los aerosoles de la respiración los principales responsables del contagio", detalla.

Una de las principales claves ya es bien conocida por toda la población: respetar la distancia. No siempre será posible mantener 2 metros entre personas, pero al menos se tiene que evitar la cercanía en el contacto. Esto también depende del espacio del que se dispone, ya que no es lo mismo un piso pequeño y mal ventilado que una casa con estancias grandes.

"Si el comedor es grande, y las distancias pueden ser prudentes podrían juntarse hasta 6 u 8 personas, pero en caso contrario quizá fuera aconsejable no pasar de las 4 personas", argumenta el doctor, que también explica que "en términos generales y si no hay otra necesidad, el consejo puede ser que la celebración se ciña a las personas que habitualmente viven juntas".

Bares y restaurantes

Para el sector de la hostelería las navidades son un buen momento: cenas de empresa, reuniones de amigos y familias, y tiempo de ocio y vacaciones que la gente suele aprovechar para pasar un rato agradable en estos establecimientos.

Sin embargo, este año tendrán que seguir operando con las restricciones que ya son habituales. Grupos reducidos de comensales, distancia entre las mesas, aforos limitados y adelanto de la hora de cierre.

Aunque acudir a un bar o restaurante no sea la misma experiencia que antes de la pandemia, hay que recordar que no es una situación de riesgo en sí misma siempre y cuando se respeten las normas establecidas: "Quizá sea más fácil cumplir las indicaciones recomendables en los restaurantes, porque en general los espacios son más amplios que aquellos de los que se disponen en casa", expone Manuel Serrano Martínez.

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Eso sí, este año no habrá fiestas de nochevieja en discotecas, ni cotillones, ni aglomeraciones en locales nocturnos para celebrar la entrada del 2021 o cualquier otra efeméride, por lo que la última noche del año será muy distinta a lo normal, más recogida y sólo con las personas más cercanas.

"Se han de evitar por todos los medios las reuniones de pie, tipo cocktail, siendo imprescindible que cada invitado o comensal ocupe su lugar todo el tiempo que dure la reunión o comida", zanja el experto.

Tiendas y comercios

Otro aspecto típico de las navidades es el de ir a hacer compras, especialmente para los regalos de los Reyes Magos.

Los grandes almacenes y centros comerciales suelen estar abarrotados los días previos al 5 de enero, también las tiendas pequeñas esperan aumentar sus ventas en esta fecha.

Durante los próximos meses no se van a ver este tipo de imágenes, aunque es de esperar que esta actividad siga en funcionamiento con las medidas de seguridad oportunas. Por ejemplo, el control de aforos y la correcta ventilación.

El doctor Serrano Martínez aclara que estos establecimientos no tienen por qué ser peligrosos si se toman en serio las normas sanitarias: "Las instalaciones deben estar ventiladas y evitar que haya más de una persona por cada 2 metros cuadrados aproximadamente, excepto aquellas que acuden juntas". A esto hay que añadir el uso obligatorio de mascarilla o la higiene de manos, barreras de protección contra el virus.

Pero al igual que viene ocurriendo desde marzo, son muchos los que seguramente van a optar por hacer sus compras a través de internet. La pandemia de coronavirus ha acelerado el comercio electrónico, y no hay que olvidar que las pymes y comercios pequeños se pueden sumar también al negocio online. Otro motivo por el que las clásicas aglomeraciones no se van a ver este año.

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De cualquier modo, el experto de QuirónSalud hace hincapié en que los comercios han hecho sus deberes en lo que respecta a reducir el riesgo de contagios:"En general se está cumpliendo bien la normativa dictada para los lugares en los que coinciden personas que no conviven habitualmente entre sí".