De los robotaxis a los coches cangrejo: las innovaciones del sector automovilístico para 2024

¿Te imaginas parar un taxi y que este no tenga conductor? O, mejor, ¿que vuele? Seguro que otro de tus sueños es conseguir que las ruedas roten 90 grados y poder aparcar el coche a la primera en el sitio libre. Pues puede que todas estas cosas las consigamos en los próximos años.

En Business Insider España hemos hablado mucho sobre que los coches eléctricos son el futuro del sector automovilístico. Sin embargo, a lo largo de este 2023 otras empresas del sector han trabajado en proyectos que nada tienen que ver con la electrificación. 

En estos últimos doce meses, muchas compañías han empezado a dar o están empezando a afianzar pasos en otros campos. Algunos de ellos son los coches autónomos, los robotaxis, nuevas formas de combustible sostenible e, incluso, nuevos colores para los semáforos.

Estas son algunas de las innovaciones del sector a las que tendremos que seguir la pista durante 2024.

Coches voladores

Si piensas en vehículos del futuro, probablemente lo primero que se te venga a la mente sean los coches voladores. Quizás tengan mucho que ver las imágenes de los dibujos animados de nuestra infancia. Sea como sea, lejos de ser simple ciencia ficción, parece que este hito está cerca de producirse.

Además, muchos de estos proyectos no son futuribles, sino que han puesto su fecha de estreno en el próximo año. Este es el caso de la empresa alemana Volocopter, que ha iniciado una carrera contrarreloj para diseñar cinco rutas de eVTOL para los Juegos Olímpicos de París de 2024. La idea es unir el centro de la ciudad con un par de aeropuertos y un helipuerto.

2023, el año del repliegue eléctrico: los fabricantes frenan la expansión de los coches eléctricos

Otra de estas compañías es VPorts, quien diseña terminales para taxis voladores y tiene su centro de pruebas en Dubai. Estos taxis aéreos podrán ponerse en funcionamiento en 2028, siempre y cuando la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos no retrase el proyecto. Algunos fabricantes como Archer Aviation y Joby Aviation son más optimistas y hablan de 2025.

A día de hoy existen más de 700 prototipos de aviones con despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) de unas 350 empresas que podrían ser usados como taxis voladores eléctricos.

Los taxis aéreos prometen transportar personas y mercancías en zonas urbanas congestionadas y conectar ciudades cercanas. La realidad es que solo media docena de empresas han desarrollado vehículos aéreos eléctricos con una autonomía de batería que alcance los 250 kilómetros.

Algunas grandes aerolíneas del mundo de la aviación como United Airlines y American Airlines son ya los clientes potenciales. Stellantis y Toyota también están interesados en colaborar con fabricantes de taxis aéreos eléctricos.

La implantación de los taxis aéreos será progresiva y se prevé que empiece como un servicio de lanzadera entre los principales aeropuertos cercanos o como una forma de conectarlos con el centro de la ciudad. Esto implica una ventaja logística enorme, aunque contratar este servicio será elevado.

Coche autónomo

Otra de las grandes promesas que están más cerca de llegar en los próximos años es el coche autónomo. Desde que Elon Musk lo prometiese en 2019, poco camino se había avanzado. 

De hecho, Tesla continúa muy rezagada en este campo, todo lo contrario que Volkswagen. Los alemanes han lanzado Moia, un proyecto que nació en 2017 y que consiste en un servicio de transporte urbano que lleva al usuario por un precio superior al de un bus, pero inferior al de un taxi. 

Hasta la fecha, este proyecto solo estaba vigente en Alemania, pero, los planes de Volkswagen pasan por extenderse a otros países europeos. Sin embargo, a día de hoy la marca alemana no puede decir que estos coches sean 100% autónomos, ya que funcionan con conductores. Pero, su objetivo es que en 2025 sean completamente autónomos. 

Pero, si hay una empresa que destaca en esta materia, esa es Vay. Esta empresa alemana ha sido capaz de poner en circulación un coche autónomo por primera vez en una carretera alemana. 

Vay utiliza un método llamado teledriving, que consiste en dirigir telemáticamente coches desde emplazamientos situados a kilómetros de distancia. Los operadores dirigen los vehículos con volantes, pedales y pantallas. Además, reciben los sonidos del tráfico a través de micrófonos y auriculares. 

Visto desde fuera, parece que estuviesen jugando a un videojuego, solo que estos coches circulan por carreteras reales y sus acciones son de verdad. La transmisión de datos se hace a través de redes móviles. En caso de fallo en la red o que ocurra una emergencia, el vehículo se detiene automáticamente.

Por último, también está Ford y su BlueCruise, que hemos probado en Business Insider España. El fabricante ha desarrollado el sistema BlueCruise, capaz de hacer realidad el concepto de "conducir sin manos". A través del monitoreo de nuestros ojos mediante una cámara de infrarrojos, durante zonas muy concretas, se pueden levantar las manos del volante y dejar que sea el coche el que tome el control.

La tecnología de asistencia al conductor de BlueCruise está entre el nivel 2 y el nivel 3, algo así como un nivel 2,5, por lo tanto, debes tener la mirada fija en la carretera para comprobar que no haya ningún peligro porque, de haberlo, debemos tomar el control del vehículo. 

Con este sistema, Ford se convierte en el primer fabricante que introduce en Europa un sistema de este tipo homologado legalmente, siendo Gran Bretaña el primer mercado en contar con él. 

Semáforos blancos

Y, con la llegada del coche autónomo, es necesario hacer ciertas modificaciones en los elementos de seguridad vial que se adecuen a la nueva realidad. Uno de estos, crucial para los vehículos, son los semáforos. 

La Universidad Estatal de Carolina del Norte ha propuesto que se incorpore un cuarto color a los semáforos. El propósito es instalar un semáforo blanco adicional destinado a los vehículos autónomos. La gestión inteligente del tráfico tendría así un doble beneficio: reducir la congestión en la carretera y también el consumo general de combustible.

Los coches y camiones autónomos no tendrán que mirar este semáforo blanco, ya que se comunicarán con él de forma inalámbrica. Sin embargo, esta señal luminosa servirá para que pasajeros y conductores humanos sepan que deben seguir a los vehículos autónomos que circulan por la intersección.

Según el estudio, el resto de colores tradicionales del semáforo conservarían su significado de siempre, mientras que las luces blancas mandarán el mensaje a los conductores humanos para que sigan al vehículo autónomo que tienen delante.

E-fuel

Gasolina, diésel y ¿biocombustible? Esta es una de las ideas que se plantea la Unión Europea para alargar la vida de los coches de combustión de una manera más sostenible. Este logro lleva sello alemán, que lo estuvo peleando durante meses hasta que consiguió que la UE diese su brazo a torcer.

El nuevo acuerdo establece que se podrán vender coches de combustión como los conocemos hoy día —son aquellos que utilizan gasolina, gasóleo o gas— más allá de 2035, siempre y cuando empleen exclusivamente combustibles sintéticos.

Pero, ¿qué son los combustibles sintéticos?

Según explica Repsol, para la elaboración de estos ecocombustibles "se utiliza electricidad procedente de fuentes renovables que, mediante un proceso de electrólisis, separa las partículas de oxígeno e hidrógeno del agua, dando lugar al llamado hidrógeno renovable. 

Por otro lado, se captura CO₂ del aire o de una instalación industrial. Finalmente, en una planta destinada a la producción de combustibles sintéticos, se utiliza el hidrógeno renovable y el CO₂ para fabricar carburantes sintéticos cero emisiones netas". Este combustible sintético se puede usar directamente en los coches de combustión, pero contaminando menos que un combustible fósil. 

En caso de salir aprobado, la Unión Europea ya ha confirmado que exigirá que todos los coches de combustión que se vendan a partir de 2035 tienen que llevar un sensor que impida que arranquen o funcionen si se utiliza gasolina o diésel.

Esto es algo que, como en todas las decisiones, dejarán ganadores y perdedores. En el primer bando se encuentran, Porsche, Mazda, Volkswagen, Ferrari o Lamborghini, ya que habían empezado a desarrollar este tipo de combustibles. En contra se encuentran, Volvo, Ford, Tesla y las marcas eléctricas chinas, que han apostado todo a la electrificación.

Coche de hidrógeno

En el camino de los coches sostenibles, además de la electrificación y los combustibles sintéticos, algunos fabricantes están investigando con motores impulsados por hidrógeno. 

Para funcionar, estos coches utilizan uno o varios depósitos en los que se almacena hidrógeno (unos 50 litros de gas por depósito), que pasa a una pila de combustible en la que, con la mezcla del oxígeno, se produce una reacción química controlada que genera electricidad. Esta se almacena en una batería de ion-litio que, finalmente, pasa a un motor eléctrico, que es el que permite que un coche de hidrógeno se mueva.

La marca que más está apostando en este campo es BMW, como ya está experimentando en el nuevo iX5. El problema principal es que la apuesta tanto de fabricantes como de gobiernos está en el impulso del coche eléctrico y no existe, al menos de momento, una infraestructura para automóviles que funcione con este combustible alternativo. 

Sin embargo, BMW espera aprovechar futuras estaciones de combustible de hidrógeno para camiones para poner fin al problema. "La clave es construir estaciones de servicio de hidrógeno combinadas para turismos y camiones", revela en una entrevista Jürgen Guldner, quien dirige el programa de tecnología de hidrógeno de BMW. 

Aparcamiento "cangrejo"

Uno de los sueños que también parece estar cerca de cumplirse es el hecho de no tener que maniobrar para aparcar. Cuantos hemos soñado que, al encontrar el hueco perfecto, las ruedas rotaban y simplemente teníamos que encajarlo en ese espacio. Ahora, Hyundai está a punto de lograrlo.

Hyundai Mobis, la división de recambios del fabricante de automóviles, ha publicado un nuevo vídeo de una tecnología que está desarrollando llamada e-Corner. El sistema permite que las 4 ruedas de un coche giren hasta 90 grados — juntas o independientes —, lo que da lugar a unas capacidades asombrosas. 

Una de sus aplicaciones es el aparcamiento. En el vídeo se ve cómo un vehículo eléctrico Hyundai Ioniq 5 se detiene justo al lado de una plaza de aparcamiento libre, gira las 4 ruedas perpendiculares al bordillo de la acera y se mete sin más. No hay que dar marcha atrás ni girar el volante hacia un lado u otro. Hyundai lo llama "conducción de cangrejo".

La tecnología también permite conducir en diagonal, inclinando las 4 ruedas 45 grados. Pero de toda la tecnología mostrada en el vídeo, el aparcamiento en paralelo y la pirueta de 180 grados parecen ser las más útiles en el mundo real. Hyundai no ha dicho si el e-Corner llegará a comercializarse. 

Hyperloop

La última innovación que traemos a esta lista, y que todo apunta a que podremos usarla en los próximos años, es el hyperloop. Se trata de un tren que es capaz de viajar hasta a 1.000 km/h a través de un sistema de tubos conectados por todo el mundo.

Como casi todas las innovaciones, el primero que se propuso trasladarlo del papel a la realidad fue Elon Musk. Sin embargo, esto ha vuelto a ser otro de sus fracasos. Hyperloop One ha comenzado a vender sus activos, a lo que se suman los despidos de sus empleados y el cierre de oficinas. El cierre definitivo será a finales de este mismo año, con lo cual apenas le quedan días de vida.

Un hecho que contrasta con las mismas fechas hace una década, cuando Hyperloop One —cuyo nombre también ha sido Virgin Hyperloop— recaudó aproximadamente unos 450 millones de dólares de fondos de capital de riesgo.

En aquel momento, el propio Elon Musk aseguraba que entraría en el top 5 de los medios de transporte más usados, cambiando por completo el conjunto de la sociedad. No obstante, el proyecto parece que se ha desinflado.

La empresa que más avanzada está en la puesta en marcha de hyperloop es la española Zeleros, con una infraestructura bastante similar a la de los aviones, la de los valencianos se basa en la levitación magnética. "En cuanto a los motores lineales, lo que hemos decidido es poner la tecnología en el vehículo para que no tenga que estar en toda la pista, solo esté en la parte inicial", explica Juan Vicén, cofundador y vicepresidente para relaciones institucionales y de negocio de Zeleros.

A pesar de que el hyperloop de Zeleros aún no es una realidad que podamos utilizar, la empresa sí que ha avanzado en su tecnología. De hecho, el Gobierno de Castilla-La Mancha ya ha anunciado una pista de pruebas —un tubo de cuatro kilómetros— para experimentar que estará completada en 2025. Además, en el puerto de Sagunto ya se está usando su motor lineal para mover mercancías.

Zeleros se ha marcado en el calendario el 2030 como fecha para tener listo todo el hyperloop.